1. ¿Cómo pueden ayudar las TIC a la mejora de la eficiencia energética?
Es evidente que las TIC son una herramienta muy importante en la gestión de la información relativa al consumo de energía, que nos ayudan a conocer y gestionar cómo, cuándo y por qué se consume la energía. Pero además son una fuente de consumo en sí mismas. El consumo en IT se ha incrementado espectacularmente en nuestras organizaciones y éste es un hecho al que también las propias TIC deben responder.
2. ¿En cuánto puede cifrarse el consumo de las infraestructuras IT?
Hay diferentes estudios que cifran el consumo en IT entre un 25% y un 35% del total del edificio corporativo. No nos hemos dado cuenta de que cada vez tenemos más dispositivos en nuestro entorno, y otros muchos que nos dan servicio. Tenemos a nuestro alcance un ordenador o dos, con un monitor, una impresora multifunción, un teléfono IP, nos conectamos a la red por wi-fi, y existen varios servidores gestionando nuestras aplicaciones. Todo esto ha producido este aumento en el consumo energético de IT. Además no tenemos conciencia de este consumo y no apagamos los dispositivos cuando nadie los utiliza. Otras veces es realmente difícil saber si nadie los va a utilizar o no podemos apagarlos directamente, como un VoIP. Se cifra en algo más del 50% de los empleados de las compañías que no apagan nunca sus equipos.
3. ¿Están las TIC preparadas para gestionarse a sí mismas energéticamente?
Definitivamente Sí. Nunca se ha tenido muy en cuenta este consumo, quizá porque se ha infravalorado y se ha creído que el consumo en IT es difícil de gestionar. Y así lo parece, ya que hay multitud de dispositivos, fabricantes, las organizaciones son complejas, los perfiles de uso son dispares, etc. Sin embargo en los últimos años, ha crecido la necesidad de gestionar energéticamente de un modo eficaz nuestras redes IT. Y realmente existe un abanico de soluciones que dan solución a este problema, desde un punto de vista más parcial, como las aportadas por los fabricantes, sólo aplicables a determinados dispositivos, o desde un punto de vista de gestión total de la infraestructura
4. ¿ Cómo funcionan las soluciones de gestión energética en IT y cómo se despliegan?
Simplificando, estas soluciones persiguen el apagado de dispositivos cuando no se están utilizando. Existen diferentes soluciones y trabajan y se despliegan de diferentes maneras. Nosotros en Bjumper cuando analizamos el problema, creímos que este tipo de soluciones deberían ser capaces de medir, actuar, gestionar y optimizar nuestra infraestructura del modo más eficaz y sencillo posible. Por tanto deberían ser capaces de medir nuestro consumo sin hardware, actuar sobre el mayor número y tipo posible de dispositivos, en diferentes sedes, con capacidad de gestionar y producir reportes de un modo jerarquizado adaptado a cada organización y que presenten una gran flexibilidad a la hora de aplicar políticas de ahorro, para conseguir adaptarnos a diferentes perfiles de usos de los empleados. Además debería ser sencilla de implantar, sin necesidad de instalación de agentes y calcular la huella de carbono. Para ello la solución debe manejar diferentes protocolos estándar de comunicación y gestión de dispositivos, adaptándose por tanto a cada tipo dispositivo, de modo que por ejemplo, para actuar sobre un PC utilizará según su sistema operativo WMI o SSH, con un switch o impresora SNMP, etc. En Bjumper estamos muy orgullosos de nuestra solución Smart IT Energy con la que podemos ofrecer a nuestros clientes todas estas capacidades que creemos deben definir esta tecnología.
5. ¿Sobre qué dispositivos pueden aplicarse?
Me gusta decir que sobre cualquier dispositivo IP. Y en muchas ocasiones es así. En principio estas soluciones parten de la gestión de dispositivos de oficina, como ordenadores, monitores, impresoras, telefonía IP, puntos de acceso… También pueden actuar sobre el CPD: PDU’s y servidores, aplicando políticas condicionadas de power capping. Resultan muy interesantes las integraciones con otras infraestructuras convencionales unidas al mundo IP.
6. ¿Qué ahorros pueden obtenerse?
En nuestra experiencia, el ahorro medio que podemos alcanzar está entre un 40% y un 60%, dependiendo de la infraestructura y características de la organización. Hay que tener en cuenta que el período de retorno de estas soluciones es de unos 6-8 meses, lo que hace que la inversión en este tipo de soluciones resulte especialmente interesante.
7. ¿ A qué tipo de corporaciones va dirigido y cómo está recibiendo el mercado estas soluciones?
La gestión energética en IT se dirige a cualquier organización que esté preocupada por la reducción del consumo energético en IT y la huella de carbono. El mercado está recibiendo muy bien este tipo de soluciones. En principio existe cierta incredulidad ante las capacidades de la herramienta, pero rápidamente las dudas se convierten en satisfacción en cuanto comprueban la sencillez con que pueden conocer el consumo de su infraestructura y definir y poner en marcha políticas de ahorro, que aseguran que ningún equipo queda encendido cuando nadie lo necesita y por otro lado, pero no menos importante, que a nadie se le apaga el dispositivo si lo está utilizando.
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