Jessika Roswall, Comisaria de Medio Ambiente, Resiliencia de los Recursos Hídricos y Economía Circular Competitiva, organiza hoy (10 de abril) en Bruselas un diálogo de alto nivel sobre la aplicación de las evaluaciones ambientales y la concesión de permisos.
El diseño y la aplicación de las evaluaciones ambientales y las normas sobre permisos ambientales, tanto a nivel nacional como de la UE, desempeñan un papel clave en la integración de las consideraciones ambientales y de competitividad. Estos objetivos son complementarios y mutuamente beneficiosos, contribuyendo a una Europa más fuerte.
La Brújula de la Competitividad establece un marco claro para que Europa se convierta en el lugar donde se inventen, fabriquen y comercialicen las tecnologías, los servicios y los productos limpios del futuro, al tiempo que se convierte en el primer continente con neutralidad climática.
La Comisión Europea no ha tardado en presentar el Acuerdo para una Industria Limpia, con propuestas concretas para garantizar un marco regulador claro, sencillo e inteligente para las empresas.
Estas propuestas incluyen la propuesta ómnibus de la Comisión sobre información y diligencia debida en materia de sostenibilidad empresarial. La atención se centra en simplificar y reducir las cargas reglamentarias y administrativas, haciendo que los procedimientos para acceder a los fondos de la UE y obtener decisiones administrativas de la UE sean más sencillos, rápidos y ligeros.
En su intervención en la inauguración del acto, el Comisario Roswall declaró lo siguiente: «El Diálogo de Aplicación de hoy permite un debate abierto con las partes interesadas para determinar los posibles retos de la aplicación y las soluciones de simplificación. Trabajando juntos, podemos hacer que los procedimientos sean más sencillos, rápidos y ligeros, manteniendo al mismo tiempo unas normas medioambientales estrictas. Esto es crucial para nuestro objetivo común: fomentar la competitividad de Europa preservando al mismo tiempo nuestro medio ambiente y nuestra salud.»
Antecedentes
El acto del jueves reunirá ideas sobre las medidas necesarias para que los Estados miembros puedan fomentar el desarrollo económico y garantizar soluciones limpias y sostenibles, con especial atención a la agilización de la concesión de permisos, incluidas las evaluaciones ambientales.
La legislación de la UE exige la realización de una evaluación ambiental antes de aprobar o autorizar planes, programas y proyectos. Las evaluaciones ambientales pueden realizarse para proyectos individuales, como una presa, una autopista, un aeropuerto o una fábrica, o para planes o programas públicos. La participación pública en la toma de decisiones es necesaria según la legislación ambiental de la UE.
Acelerar los procesos de autorización es clave para reforzar la competitividad industrial de Europa durante la transición ecológica.
En los últimos dos años, la Comisión Europea ha presentado varias medidas para aumentar la simplificación y la eficiencia de los procedimientos de concesión de permisos, permitiendo a los Estados miembros acelerar la aprobación de determinados proyectos de importancia estratégica, como en el ámbito de las energías renovables, las materias primas críticas y la industria de balance cero.