¿A qué retos se enfrenta el sector tecnológico? ¿Y el sector industrial?
En Madrid hemos hecho una apuesta por transformar digitalmente nuestra región y hacer que nuestros ciudadanos alcancen una experiencia que sea proporcional a la calidad de vida que deben tener. Pero esa transformación digital no está exenta de ser responsables con nosotros mismos y con las generaciones venideras, y debe tener en cuenta la sostenibilidad de la región y del planeta, desde un punto de vista medioambiental: una transformación digital no será correcta y completa si no tiene en consideración la eficiencia energética como objetivo para alcanzar la sostenibilidad ambicionada.
Por ello, el reto al que debemos poner todos nuestros esfuerzos debe tener un capítulo dedicado a la sostenibilidad, de manera que el plan director que de la estrategia se desprende, tendrá en cuenta los principios de sostenibilidad y su aplicación en los planes anuales operativos a ejecutar.
Más allá de aspectos tecnológicos debemos trabajar intensamente en la definición y ejecución de actuaciones en materia de medio ambiente y su evaluación, biodiversidad, economía circular, descarbonización, energía y transición energética, calidad del aire, etc.
Entendemos que la digitalización impulsa un ecosistema de actuaciones que deben tener en cuenta, además, los principios de la RSC, (Responsabilidad Social Corporativa) de tal manera que incrementamos la competitividad, el talento, la productividad, la reducción de los costes de los procesos, el aumento de la fluidez en la comunicación interna haciéndola más eficiente y mejorando, por otro lado, la experiencia del ciudadano y generando, gracias a todo, un clima que invita a inversores a confiar en el que lidera un exitoso proceso de digitalización.
¿Quién considera está impulsando más la adopción de estas tecnologías: ¿Gobierno, proveedores de tecnología, empresas usuarias…? ¿Cuáles son las principales barreras?
Son las empresas quienes lideran claramente la implantación de estas tecnologías, pero en esa carrera también se encuentra las Administraciones Públicas, aunque de manera desigual. Por ejemplo, es indudable que la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid lideran esa carrera en cuanto a Administraciones Públicas se refiere. Y es por ello por lo que ambas tienen objetivos muy claros, como son:
Eliminar la brecha digital: la falta de acceso a la tecnología avanzada genera desigualdad social, laboral y cultural. Para combatirlas, es necesario ofrecer a toda la sociedad la posibilidad de formarse en las nuevas tecnologías.
Garantizar la intimidad del usuario: La cesión de los datos privados en Internet es un problema de gran envergadura. Se requiere una regulación estricta para velar por la privacidad de todos los usuarios y asegurarse de que sus datos no se utilizan sin su consentimiento.
Velar por el uso ético de la nueva tecnología: Innovaciones como los algoritmos de aprendizaje automático todavía están por regular. Las empresas que poseen la capacidad de recoger, interpretar y utilizar los datos de los usuarios tienen un poder que debe ser limitado por los poderes públicos.
Buscar soluciones sostenibles: El progreso científico y tecnológico conlleva un impacto ineludible en el medio ambiente. Es imperativo que las soluciones tecnológicas sean también sostenibles y se lleven a cabo de forma energéticamente eficiente, para minimizar el impacto sobre el medio ambiente.