1.Considera estratégica la necesidad de reducir el consumo energético entre las empresas de su sector. ¿Se han marcado una Plan con objetivos y tiempos para mejorar la Eficiencia Energética?
Una gestión energética sostenible en los entornos urbanos es clave para mejorar la calidad de vida en nuestras ciudades. Se trata de una estrategia clave para garantizar la sostenibilidad desde distintos puntos de vista.
Desde la perspectiva medioambiental, se potencian las oportunidades y recursos que las administraciones locales tenemos para luchar contra el cambio climático y minimizar el impacto de la actividad de empresas, hogares, etc., reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero.
Económicamente, la eficiencia energética también es rentable porque logra disminuir el coste de gastos fundamentales para el funcionamiento de los servicios de la ciudad.
El Ayuntamiento de Arganda del Rey es consciente de articular una estrategia en este sentido y por eso, en el marco del Pacto de Alcaldes, se está diseñando un Plan de Acción de Energía Sostenible (PAES) que marcará las prioridades en materia de eficiencia energética y los indicadores para supervisar la evolución de las medidas que pondrá en marcha la institución.
2.¿Qué acciones desarrolladas recientemente por su organización considera más relevantes en materia de Eficiencia Energética? ¿Qué papel han tenido las TIC y la innovación?
Desde el Ayuntamiento de Arganda del Rey hemos definido varias iniciativas que buscan incorporar las TIC en la gestión energética municipal para potenciar el ahorro económico y su uso más eficiente en equipamientos municipales.
De igual forma, estamos trabajando distintos proyectos innovadores para incorporar las TIC en el control de las emisiones de gases de efecto invernadero en espacios públicos y desde el Ayuntamiento participamos en distintos instrumentos financieros nacionales y europeos para lograr la financiación necesaria para impulsar estos proyectos innovadores, en el marco de la puesta en marcha de una plataforma de ciudad que incorpora criterios de smart city.
El objetivo es integrar en la gestión cotidiana de la ciudad nuevas herramientas que permitan una mayor agilidad y eficacia en la atención al ciudadano, un uso más eficiente de los recursos y una mejor gestión del territorio. Y para ello, la incorporación de las TIC es esencial, al igual que la adaptación de nuestras estructuras organizativas, de los procedimientos de coordinación y de gestión de la información, etc.
3.¿Quién considera está impulsando más la adopción de estas tecnologías: Gobierno, proveedores de tecnología, empresas usuarias…? ¿Qué más se podría hacer? ¿Cuáles son las principales barreras?
Las principales barreras son financieras. Las administraciones locales seguimos teniendo una evidente dificultad para costear proyectos que requieren inversiones importantes. Sin embargo, entiendo que la estrategia debe pasar por analizar los retornos que generan las innovaciones en nuestra organización y en la gestión de los servicios y planificar a medio plazo el gasto en proyectos estratégicos que, con una base tecnológica, garanticen una viabilidad a largo plazo con el máximo impacto sobre la ciudad y nuestros vecinos.
Esto requiere de un esfuerzo en planificación plurianual y en un diseño estratégico de los proyectos de calado a abordar, pero merece la pena. Más si tenemos la opción de canalizar recursos externos e implicar a distintos colectivos: desde organizaciones empresariales a socios tecnológicos pasando por instituciones públicas colaboradoras que han desarrollado proyectos en sus territorios, colectivos ciudadanos, etc.
Desde este punto de vista creo que tanto desde el sector público como desde la iniciativa privada se viene apostando por la innovación tecnológica, activando recursos para financiar proyectos, poniendo a disposición territorios y organizaciones para generar laboratorios de ideas e iniciativas piloto.
Evidentemente siempre se podría hacer un mayor esfuerzo pero hay dos elementos que debemos tener en cuenta: el primero es que no siempre somos capaces, ni las instituciones públicas ni las entidades privadas, de acompasar nuestro ritmo al de los avances tecnológicos. Esto hace que debamos aprender y seleccionar las soluciones más útiles, efectivas y viables y además aquellas que se alineen con nuestros objetivos como administración pública: el acceso universal a los servicios, a la información, la transparencia, etc.
Pero además, debemos hacer un esfuerzo y sobre todo, ser capaces de canalizar los valores de la estrategia del cambio, la innovación y la mejora en nuestras organizaciones, para garantizar que las soluciones dan respuestas reales y efectivas a los problemas sobre los que pretendemos incidir: no se trata solo de implantar tecnología, si no de usarla, y usarla bien.
4.¿Considera que ha mejorado su organización con la implantación de Tecnologías de la Información y Comunicaciones?
Sin duda. Ninguno de nosotros podemos cuestionar el avance que ha supuesto la gestión tecnológica de determinados procedimientos. La gestión de la información, la comunicación con nuestros vecinos a través de nuevos soportes, el acceso a nuevos recursos compartidos en el seno de la administración… Es un hecho.
Como lo es que debemos seguir trabajando en esta línea y avanzar mucho más: facilitar el acceso a la administración electrónica y dar respuesta a los distintos perfiles tecnológicos de la población, hacer real la premisa de la “administración sin papel”, mejorar aún más la transparencia municipal y explotar mucho más las opciones que ofrecen las TIC para recopilar la información y realizar una mejor planificación de la ciudad.
Esto entre otras cosas, puesto como señalaba anteriormente, en materia tecnológica siempre habrá una asignatura pendiente que tendrá que ver con nuestra capacidad de adaptación a los nuevos avances e innovaciones.
