La transformación digital en la que estamos inmersas todas las corporaciones en los últimos años, y concretamente en el sector del transporte aéreo apunta de forma clara hacia conceptos como la sostenibilidad, eficiencia y mejora energética.
Existen múltiples áreas en las que este cambio es palpable, pero nada mejor que un ejemplo, en un área en concreto para mostrar la evolución. En el transporte de mercancías por avión, existen una serie de pasos a dar en cada punto de paso de la mercancía, ya sean aduanas, aeropuertos, y almacenes. Uno de ellos es la parte documental.
En 15 años hemos pasado de sacar 15 copias de cualquier documento, a prácticamente poder prescindir de la copia impresa de cualquiera de ellos. Para hacer una operación de transporte aéreo, necesitábamos dejar copias de los certificados de origen, de los documentos de transporte, de los documentos aduaneros, de las facturas comerciales, packing list, etc… en cualquier punto por el que pasaba la mercancía, ya fueran aeropuertos, aduanas, almacenes y transportistas. Todos necesitaban copias físicas de todo (las famosas fotocopias). Actualmente son mensajes EDI que viajan entre operadores, compañías aéreas, aduanas, junto con la documentación digitalizada (y firmada digitalmente). Todavía queda camino por recorrer, pero llevamos avanzado mucho.
Esa cantidad ingente de documentación era almacenada en grandísimos archivos físicos, costosos de mantener y con el consiguiente ahorro de toneladas de papel.
¿A qué retos se enfrenta el sector tecnológico? ¿Y el sector industrial?
Muchos son los retos que tenemos por delante, la digitalización está llegando a todos los sectores de la sociedad y eso está impulsando la adopción de todo tipo de estándares, aunque uno de los que más creemos va a influir en el medio plazo es la tecnología blockchain. Las compañías que nos movemos en entornos tan regulados como el comercio internacional, dependemos enormemente de las administraciones públicas de todos los países del mundo, por lo que el mayor reto será por parte de estas administraciones en su transformación digital (con las consiguientes nuevas regulaciones) y en lo que éstas nos afecten a todos los actores implicados en el comercio internacional.
¿Cómo se puede lograr un despliegue eficiente de las tecnologías?
Con economías de escala. Una gran corporación puede centrarse en la eficiencia energética y económica, las medianas empresas sólo podemos lograrlo ‘uniendo’ nuestra capacidad, esto es, utilizando Datacenters públicos, ya sea en modo privado, o en modo totalmente público. La madurez de la que adolecían las infraestructuras como servicio (IaaS), ya se ha conseguido y con elevadas cuotas de seguridad y confiabilidad.
¿Qué acciones desarrolladas recientemente por su organización considera más relevantes en materia de Eficiencia Energética? ¿Qué papel han tenido las TIC? ¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en este ámbito?
La acción más relevante, sin lugar a dudas, ha sido el deshacernos de nuestros 2 históricos CPD’s y migrar los servidores físicos y centrales de teléfono físicas a Datacenters virtuales. La economía de escala hace que el gasto energético que individualmente teníamos un montón de medianas empresas (Aires acondicionados, generadores, Sais, Servidores físicos, etc…) estemos compartiéndolos, además en Datacenters pensados desde el principio con mentalidad de eficiencia energética.
¿Considera que ha mejorado la posición competitiva de su organización con la implantación de Tecnologías de la Información y Comunicaciones? ¿y en lo referente a competitividad energética?
Sin lugar a dudas, nuestro presidente siempre dice una frase que lo resume: ‘Somos una empresa tecnológica que mueve paquetes entre dos puntos del mundo’. El transporte ya es una industria consolidada, cada vez más eficiente, y bastante cambiante, pero el verdadero valor de nuestro sector es entregar información real, y en tiempo a nuestros clientes. Un avión puede sufrir un retraso e incluso una cancelación debido a causas ajenas, pero si el cliente final está informado al instante, siempre podrá reaccionar.
¿Cómo le gustaría ver a España, energéticamente hablando, en el año 2030?
Como lo que debe de ser en función de los recursos naturales que poseemos, de su afortunada ubicación geográfica y su relieve. Gracias a las cadenas montañosas y cuencas hidrográficas, al porcentaje de días del año soleados, y a las zonas de viento recursivo.
España no debe dejar pasar la oportunidad de convertirse en un referente mundial en la industria de las energías renovables. Tanto en la producción, como en el desarrollo, y sobre todo en la innovación y la investigación.
CIO de Grupo Space Cargo
