¿Qué papel juega la tecnología en conseguir que edificios instituciones/ciudades/industrial/ centros de datos más eficientes energéticamente hablando?, ¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en este ámbito?
La tecnología juega un papel absolutamente primordial en la eficiencia energética. Gracias a la automatización y digitalización podemos conseguir unas eficiencias que de un modo manual son imposibles. A modo de ejemplo, a la vez podemos estar controlando instalaciones de generación de frío/calor y, en función de los sensores distribuidos por el edificio, aportar a cada área lo que necesita sin desperdiciar energía, y por lo tanto, aumentando la eficiencia y la disminución de emisiones. Esto mismo se aplica a procesos productivos en los que se ajusta la generación a las necesidades reales del proceso y se evita el desperdicio energético. En el caso de la compañía de ciencia y tecnología en la que trabajo, Merck, estamos llevando a cabo una inversión enorme en digitalización para ser más eficientes desde todos los puntos de vista: fabricación, distribución, etc… y así cumplir con los estándares de sostenibilidad que nuestra estrategia corporativa contempla.
Considera estratégica la necesidad de reducir el consumo energético entre las empresas del sector industrial. ¿Se han marcado un Plan con objetivos y tiempo para mejorar la eficiencia energética?
Merck asumió en 2020 un reto muy ambicioso: reducir nuestras emisiones directas e indirectas en un 50% para el 2030 (¡10 años antes de lo establecido en el Pacto Verde Europeo!) y ser climáticamente neutrales en 2040, además de reducir el consumo de recursos.
En el caso de la planta biotecnológica que tenemos en Tres Cantos (Madrid), estamos trabajando desde hace más de 25 años en la eficiencia de nuestros procesos productivos para reducir el consumo energético por unidad producida. Es un camino que no tiene fin, es un claro ejemplo de mejora continua. En relación con la reducción de emisiones de CO2, estamos electrificando procesos en los que dependemos de combustibles fósiles. Además, acabamos de poner en marcha nuestra planta fotovoltaica, que será inaugurada en pocas semanas, y que nos permitirá reducir la compra de energía eléctrica en un porcentaje notable:
¿A qué retos se enfrenta el sector tecnológico? ¿Y el sector industrial?
Actualmente estamos viviendo una revolución, estamos todos metidos en ella. Desde nuestro móvil podemos hacer cosas inimaginables hace 20 años.
El mayor reto que estamos viviendo ahora es el de la digitalización. En mi caso particular, trabajo en una planta biotecnológica altamente automatizada, pero no todo está interconectado. Nos encontramos en la fase de conectar los equipos productivos entre sí. Tenemos equipos modernos que son sencillos de conectar a la red porque ya se han diseñado para ello, pero también tenemos equipos con más de 20 años. Estos últimos suponen un mayor reto porque hay que adaptar los controles para poder conectarlos y esto no es sencillo.
Otro desafío es la ciberseguridad: al conectar más equipos hay más posibilidades de sufrir un ataque y de que se paralice la actividad productiva, por lo que hay que dotar las redes, centros de datos, etc… con los equipos y herramientas adecuadas para evitar estas amenazas.
Por último, otro reto al que nos enfrentamos en la industria en la actualidad es la dificultad para encontrar profesionales relacionados con la digitalización: expertos en automatización/digitalización, ciberseguridad, analistas de datos, etc… El mercado necesita más perfiles de este tipo y hoy por hoy, son complicados de encontrar.
¿Qué valoración tienen los indicadores de eficiencia energética/ sostenibilidad en la definición de vuestros proyectos tecnológicos?
En Merck, cada proyecto que presentamos para la planta se somete a una evaluación de sostenibilidad. Si el proyecto no cumple con los requisitos (eficiencia, reducción de emisiones, reducción del consumo de agua, reducción consumo energético) no se aprueba. Como comentaba antes, que un proyecto cumpla con nuestros estándares de sostenibilidad es imprescindible para llevarlo a cabo. La compañía está 100% comprometida con los objetivos que tenemos marcados en esta materia.
¿En su organización hay más implicados en estos temas (CIO, COO, CEO…?
Puedo decir con orgullo que la implicación en nuestra compañía viene desde nuestra CEO global, Belén Garijo. Desde la alta dirección de la compañía se promueve y apoya la sostenibilidad, la eficiencia y la digitalización en todos los ámbitos. Es una apuesta corporativa que atraviesa todos los niveles de la organización