¿Esta España preparada para para cumplir con los retos del Horizonte 2030?
No invertir en eficiencia energética es malgastar todos los días. Actualmente, contamos con tecnología en diferentes campos que permite ahorros energéticos y un consumo más responsable de energía. Por ejemplo, en el mundo de la iluminación, las nuevas tecnologías de iluminación LED y conectada permiten ofrecer ahorros que pueden llegar a ser superiores al 80% respecto a las instalaciones actuales.
No podemos olvidar que la iluminación representa el 15% del consumo energético mundial. Si todos los puntos de luz que existen hoy en día en el mundo cambiasen a las tecnologías de iluminación eficientes ya existentes, podríamos bajar dicho porcentaje al 8%, lo que supondría unos ahorros energéticos de 272.000 millones de euros y la disminución de 1.400 millones de emisiones de toneladas de CO2 al año.
En esto contexto, los retos marcados en el Horizonte 2030 son alcanzables si se cuenta con la voluntad política, la colaboración empresarial y ciudadana y las inversiones necesarias para acometerla. España puede y debe poner la eficiencia energética como prioridad en la agenda política, haciendo de ello un eje transversal y de crecimiento para el futuro.
¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en la sociedad actual?
Observamos tres tendencias globales que marcaran el devenir de la sociedad y la tecnología. En primer lugar, la población está creciendo y se está urbanizando. Naciones Unidas estima un crecimiento de la población en 2.500 millones de personas entre 2014 y 2050. Para esa fecha, el 80% de la población vivirá en grandes núcleos urbanos. En segundo lugar, existe un reto en la gestión de recursos naturales y energéticos. Finalmente, la sociedad está experimentando un proceso de digitalización. La irrupción del Internet de las Cosas obliga a conectar diferentes dispositivos para que puedan interactuar de forma combinada y responder a necesidades diarias.
Frente a estas tendencias, la industria de la iluminación sufre una autentica revolución. La demanda de iluminación será creciente, derivado de la mayor población. Al mismo tiempo, la iluminación debe ser más eficiente, para combatir el reto de los recursos. Sin duda, la iluminación es digital, incrementando funcionalidades y control adicional, así como la integración en plataformas que permitan la interacción con otros dispositivos.
¿Qué papel juega la tecnología en conseguir un incremento de la eficiencia energética?
La tecnología juega un papel fundamental para conseguir los horizontes marcados para el 2030. A fecha de hoy, existen tecnologías que ya permiten grandes ahorros, como es el caso de la iluminación conectada. En esta línea la inversión en innovación debe centrarse en desarrollos sostenibles. Desde Signify, invertimos anualmente cerca del 5% de nuestras ventas en I+D tratando de mejorar 8 áreas, 5 desde el punto de vista medioambiental y 3 desde un punto de vista social: consumo de energía, peso y materiales utilizados, circularidad, embalaje, uso de sustancias, necesidades básicas, acceso asequible a la luz e iluminación centrada en la salud y bienestar de las personas. Estás 8 áreas son la base de nuestra innovación sostenible, que nos permite ofrecer al mercado iluminación más eficiente energéticamente, más digital, sostenible y centrada en las personas.
¿Cómo le gustaría ver a España, energéticamente hablando, en el año 2030?
En estos momentos, España tiene la oportunidad de abanderar la eficiencia energética a nivel europeo. Invertir en tecnologías de eficiencia energética supone la creación de actividad económica y empleo, generar innovación sostenible y dar pasos en la dirección correcta para conseguir los objetivos que nos marquemos como país.
Desde Signify apostamos por fijar objetivos ambiciosos y vinculantes en materia de eficiencia energética en las nuevas legislaciones que ahora se están negociando. Por ello, en la Cumbre del Clima de París en 2015 (COP21) nos comprometimos a ser neutrales de carbono a nivel mundial en 2020. Trabajando con este objetivo, en España somos neutrales de carbono desde el año pasado, gracias a la reducción de emisiones en nuestras operaciones, el uso de energías renovables y la compensación de emisiones de carbono.
La colaboración entre organismos públicos y privados, así como los ciudadanos, es crucial para pensar en un 2030 eficiente energéticamente. En manos de todos está establecer legislaciones, presentar tecnologías, cambiar hábitos y tomar consciencia para poder asegurar un futuro sostenible a las generaciones venideras.