La sociedad y las nuevas tendencias de consumo de los ciudadanos van a imponer a las empresas a ser más eficientes y sostenibles en temas de movilidad, tanto en el entorno urbano como en el transporte en carretera. Ante este escenario la gestión de las flotas de vehículos se enfrenta como gran prioridad a reducir sus emisiones, provenientes de combustibles fósiles, mediante una transición eficiente hacia el vehículo eléctrico y al mismo tiempo obtener información precisa y objetiva que optimice la productividad de sus activos. La telemática se convierte bajo este escenario en la pieza clave ante el nuevo paradigma de movilidad.