Un año más, la Consellería de Economía, Empleo e Industria de la Xunta de Galicia ha puesto en marcha los mecanismos destinados a promover el ahorro y la eficiencia energética en los sectores industrial y de servicios. Se trata de un programa que logra multiplicar por seis su presupuesto, alcanzando los 9,5 millones de euro, y que permitirá, según explicó el director del Igape, Javier Aguilera, en la jornada sobre eficiencia energética e Industria 4.0 celebrada el pasado 12 de enero en Santiago, impulsar este tipo de iniciativas en el tejido empresarial gallego «acercando los procesos productivos hacia la mencionada Industria 4.0».
Para Aguilera, «las actuaciones de eficiencia energética permiten disminuir costes y ganar competitividad en el camino hacia una fábrica más inteligente», por eso es necesario reducir los consumos, que hoy por hoy representan en los sectores industrial y de servicios gallegos el 45% y el 9% del consumo de energía final, respectivamente. Sin embargo, estos son campos que abren un interesante campo de actuación, según se desprende de diversos estudios sectoriales realizados por el Instituto Energético de Galicia (Inega), que inciden en que el porcentaje de ahorro de energía en estos sectores -tras la puesta en marcha de medidas de eficiencia- puede situarse en el 15% para el sector industrial y el 30% en el sector servicios.
En este contexto, Javier Aguilera destacó la incorporación de aplicaciones TIC y la sensorización industrial como «instrumentos fundamentales» para que las empresas consigan mayores grados de eficiencia en su gestión. En línea con todo ello, pasó a detallar el programa que, enmarcado dentro de la Agenda de la Competitividad Galicia – Industria 4.0, permitirá el impulso e implantación de sistemas de encausado avanzado de datos e inteligencia artificial aplicados a la optimización del consumo energético, en el camino hacia la fábrica inteligente. El objetivo no es otro que dotar a las industrias beneficiadas de programas capaces de reajustar, de manera sistemática, algunos de sus parámetros en función de las experiencias pasadas con el objeto de optimizar el consumo.
Pero además, y junto a esta apuesta por la Industria 4.0,, Aguilera dejó claro que se seguirá impulsando proyectos centrados tanto en la mejora de las equipaciones consumidoras de energía del proceso productivo industrial como en la instalación de sistemas de aprovechamiento de energías renovables, sin olvidar la implantación de sistemas de gestión energética certificados conforme la norma ESO 50001. También se apoyará la realización de auditorías energéticas que analicen de forma integral el proceso productivo de la empresa y, en el campo de la movilidad, el relevo de vehículos por otros más eficientes que empleen combustibles alternativos.
De este modo, y segun destacó el director general de Energía y Minas, Ángel Bernardo Tahoces, quien clausuró la jornada, la línea aspira a impulsar alrededor de 300 proyectos en las empresas gallegas. Por eso, todas las compañías interesadas en impulsar este tipo de iniciativas pueden presentar su solicitud desde el pasado viernes 15 hasta el próximo 29 de febrero.
Estos proyectos, cuyas ayudas pueden llegar hasta los 200.000, generarán una inversión conjunta de más de 32 millones en el tejido productivo, «contribuyendo a la adopción de medidas que permitirán conseguir un ahorro energético de casi 11.000 toneladas equivalentes de petróleo al año y un ahorro económico de 10 millones por ejercicio», subrayó Bernardo Tahoces, quien también puntualizó que se promoverán alrededor de 430 empleos, el 60% de ellos directos, evitando la emisión a la atmósfera de casi 19.000 toneladas de CO2 al año.
