La transición ecológica tiene como objetivo la descarbonización de la economía mediante la electrificación de ésta, la integración de las energías renovables y apuesta por medidas de eficiencia energética. La transformación energética es uno de los pilares que posibilita la transición ecológica al facilitar la contribución de las energías renovables al mix energético. La variabilidad de la generación con energías renovables hace necesario el apoyo de otro tipo de generación, como los ciclos combinados, para actuar como soporte cuando éstas no están disponibles.
Este hecho provoca que las centrales de ciclo combinado estén sometidas a frecuentes ciclos de arranque y parada para dar estabilidad a la red, trabajando en condiciones que no son las de diseño base y en las que es esencial realizar una óptima gestión de sus activos para optimizar al máximo su proceso de arranque, mejorando su disponibilidad, y su entrada en el mercado cuando son requeridas.
El proceso de arranque de este tipo de centrales viene determinado por la situación de partida de la instalación, en definitiva, variables físicas que deben de tener una evolución desde sus valores iniciales hasta sus valores objetivos, lo que dificulta al operador de planta el poder hacer una estimación precisa del proceso de arranque, para cualquier condición inicial. La ausencia de patrones para algunas fases del proceso de arranque dificulta la detección temprana de desviaciones y también el análisis posterior.
En este proyecto se ha implantado una solución basada en datos empíricos, y se han aplicado técnicas de analíticas de datos y algoritmos de optimización, además del uso de interfaces inteligentes para la monitorización de parámetros críticos, para supervisar y optimizar los procesos de arranque de la central de ciclo combinado de Besós 3, hasta alcanzar el mínimo técnico.
Ello permite que el operador de planta mejore la planificación de los arranques, mediante una mejor estimación de tiempo, consumos de combustible y auxiliares eléctricos, así como de generación de energía eléctrica, reduciendose los costes del proceso y mejorando los beneficios de la planta al minimizar los tiempos de acoplamiento.
Además, el poder monitorizar y supervisar los parámetros críticos mediante interfaces inteligentes, reduce la carga cognitiva del operador, ya que éste es capaz de detectar de manera rápida e intuitiva las desviaciones significativas en los parámetros importantes que supervisa.
Esta mejora en el seguimiento y detección temprana de desviaciones permite también al operador de planta poder tomar decisiones informadas para ajustarse al arranque planificado.