La ciudad barcelonesa de Sant Feliu de Llobregat inauguró la pasada semana un sistema de recarga de energía fotovoltaica. Se trata de una fotolinera para coches eléctricos, que ofrece este servicio durante la jornada laboral. Cualquier ciudadano puede dejar su vehículo cargando en la fotolinera, situada en la estación de Cercanías de Sant Feliu.
El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha puesto en funcionamiento junto a la estación de Cercanías de Sant Feliu de Llobregat una fotolinera, una instalación que permite la recarga de vehículos eléctricos mediante la energía solar. Lo que supone un ahorro económico y energético para el Ayuntamiento de la localidad.
El vicepresidente de Medio Ambiente de la AMB, Eloi Badia, y el alcalde de Sant Feliu de Llobregat, Jordi San José, presidieron la inauguración de la segunda fotolinera laboral metropolitana, después de la que ya funciona en Esplugues de Llobregat (Barcelona).
Eloi Badi explicó que la instalación «forma parte del proyecto de transición energética del AMB, que incluye el ahorro y la eficiencia, la generación de renovables, el operador metropolitano energético y la sensibilización». Por su parte, el alcalde de Sant Feliu, Jordi San José, indicó que la fotolinera «forma parte de un proyecto más amplio que es la transición energética hacia las energías renovables, el cual debe instalarse en nuestra cultura, no sólo la política sino también la cotidiana». En este sentido, próximamente en Sant Feliu habrá tres puntos de recarga eléctrica, uno en el polígono de El Pla, y los otros dos, distribuidos por la ciudad.
La AMB ha informado de que la instalación de la fotolinera junto al aparcamiento de la estación de Cercanías de Sant Feliu permitirá a cualquier ciudadano que quiera entrar en Barcelona aparcar su vehículo eléctrico y cambiar al transporte público, mientras su coche se recarga con energía renovable durante la jornada laboral.
Mediante una pérgola fotovoltaica, la fotolinera convertirá la energía solar en electricidad que se destinará a la recarga de los vehículos eléctricos y la energía sobrante se aprovechará para suministrar energía al Casal Municipal de la Tercera Edad que hay al lado.
Esta es la segunda fotolinera laboral metropolitana, después de la de Esplugues, destinada a los trabajadores municipales del Ayuntamiento. Este servicio metropolitano se enmarca dentro de las políticas de transición energética del AMB, que quieren aumentar la producción de energía renovable y de proximidad y reducir las emisiones de CO2, y en el marco de las políticas metropolitanas de mejora de calidad de el aire.
