Durante el proyecto de alumbrado de las principales carreteras en Bizkaia, se han sustituido más de 8.000 luminarias VSAP por tecnología LED conectada, reduciendo el consumo energético en torno a un 60%. La actuación mejora los niveles lumínicos y la seguridad vial, cumple la normativa de eficiencia y sostenibilidad, disminuye emisiones y costes de mantenimiento, y refuerza el compromiso de la Diputación Foral con la eficiencia energética.
Sostenibilidad y conectividad a través del alumbrado de las principales carreteras de Bizkaia
Indicadores y procesos de mejora
Indicadores: reducción del consumo anual de 7,3 GWh a 2,9 GWh (-60%), ahorro económico >30%, menor potencia instalada, mejora de uniformidad lumínica y reducción del deslumbramiento, disminución de emisiones de CO₂.
Procesos de mejora: uso de telegestión y regulación adaptativa, seguimiento de aforos de tráfico, mantenimiento preventivo optimizado, actualización normativa continua y reinversión de ahorros en nuevas medidas de eficiencia.
Cuantificación/Estimación reducción consumo
La sustitución por luminarias LED en el proyecto ha reducido el consumo anual de 7.286.048 kWh a 2.902.903 kWh, lo que supone un ahorro estimado de 4.383.145 kWh/año, equivalente a una reducción del 60% respecto al consumo previo.
Cuantificación/Estimación reducción emisiones CO2
Se ha reducido el consumo eléctrico anual de 7.286.048 kWh a 2.902.903 kWh, lo que representa una disminución de 4.383.145 kWh. Aplicando el factor de emisión oficial publicado por la CNMC para 2024 (0,283 kg CO₂/kWh), la reducción estimada de emisiones es de 1.240,43 toneladas de CO₂ al año.
Innovación aplicada y buenas prácticas
La innovación del proyecto se centra en la incorporación de luminarias LED de última generación, que ofrecen mayor eficiencia energética, mejor reproducción cromática, uniformidad y una vida útil más larga respecto a la tecnología VSAP. Además, se han implementado sistemas de regulación y telegestión digital, lo que permite ajustar el flujo luminoso en función de los aforos de tráfico y horarios, optimizando así el consumo.
Esta gestión inteligente posibilita un control más preciso, una reducción de costes de mantenimiento y una mejora continua de la eficiencia. Entre las buenas prácticas destacan la adecuación a la normativa vigente de eficiencia energética y reducción de contaminación lumínica, la mejora de la seguridad vial mediante una iluminación más homogénea y sin deslumbramientos, la reducción de emisiones de CO₂ y la optimización de recursos públicos. Todo ello refuerza la sostenibilidad y sirve de ejemplo de acción pública responsable y eficiente.
Uso de tecnologías (TICs)
El proyecto integra sistemas de telegestión y control digital que permiten monitorizar y regular en tiempo real las luminarias LED instaladas. Gracias a las TIC se ajusta el nivel de iluminación según aforos y horarios, optimizando consumo y alargando la vida útil de los equipos. Estas herramientas facilitan la gestión remota de incidencias, la planificación del mantenimiento preventivo y la generación de datos para evaluar la eficiencia y seguir mejorando el servicio.