Dentro de la gestión de activos y particularmente durante el mantenimiento en la fase productiva, las empresas buscan por diferentes medios conseguir la e3 (eficacia, eficiencia y efectividad). Deben concentrar los esfuerzos en la optimización de los recursos, sin perder de vista la efectividad. Las empresas españolas están concienciadas en el ámbito de la eficiencia energética, tanto por razones económicas, como de eficiencia y medioambientales.
- Eficiencia: Uso adecuado de los recursos materiales y de personas de la organización
- Eficacia: Determinación clara y concisa de las operaciones a realizar ante una necesidad, objetivos y metas.
- Efectividad: Porcentaje del objetivo propuesto, de la forma más eficiente posible
Las organizaciones tienen la necesidad de ser rápidas, productivas y eficientes con sus recursos, la tecnología ha llegado para solventar ciertos problemas y acabar con las barreras de las organizaciones gracias a diferentes sistemas innovadores adaptables a las necesidades de cada una. La tecnología puede ayudarnos, en aquellos escenarios en los que nuestro volumen de activos productivos es complejo de manejar y gestionar, para garantizar la mejora continua de nuestros planes de mantenimiento. Lo que antes tenías en semanas e incluso meses, hoy en día es posible tenerlo en unos pocos minutos y sin grandes esfuerzo ni complicación.
Particularmente emplear los nuevos avances tecnológicos es necesario en aquellos escenarios de activos, con cierta dificultad de localización (interior o exterior), con afectaciones ambientales y de entorno.
Para ellos debemos de dotarnos de tecnología para garantizar a partir del histórico de resultados ser más predictivo y proactivo en la mejora de nuestros planes. Como las soluciones GIS (Sistemas de información geográfica), vuelos lidar, sistemas de cálculo de criticidades, sensórica… pueden ayudarnos en la mejora y calidad del servicio y por consiguiente con reducción de costes, materiales, desplazamientos, energía…Un modelo energético, sostenible, no complejo en cuanto a su desarrollo e implantación y totalmente fiable y transparente es fundamental para una organización. La tecnología debe tener un gran papel y su aplicación debe resultar fundamental para el desarrollo de los modelos de eficiencia en el país. Cuando se cuenta con un buen respaldo tecnológico las barreras de comunicación pasan a segundo plano.
En definitiva, las empresas pasan a ser más productivas.