El Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) ha desarrollado un sistema que permite que el vehículo eléctrico funcione no sólo como alternativa a la movilidad sostenible, sino también como sistema de almacenamiento y venta de energía que se puede volcar a la red eléctrica cuando el vehículo no se está utilizando.
El ITE lidera el Proyecto Europeo SmartV2G, que está formado por un equipo multidisciplinar de 7 socios de 4 países diferentes. El consorcio completo del proyecto se reunió ayer en Ljubljana (Eslovenia) para presentar los resultados científicos y tecnológicos del trabajo realizado durante los últimos 3 años.
Este sistema, informa el ITE en una nota de prensa, tendrá beneficios tanto para los usuarios, que podrán vender la energía que no consumen, como para las compañías distribuidoras, que podrán disponer de nuevos elementos de generación eléctrica que aseguren energía suficiente para suministrar en caso de problemas de sobrecarga en la red.
