¿A qué retos se enfrenta Endesa en el sector de la distribución de energía eléctrica?
La evolución de las redes eléctricas de un modelo unidireccional de flujos de energía hacia el cliente basado en grandes centros de generación, a un modelo bidireccional de flujos de energía y con muchos más centros de generación de energía y más distribuidos, suponen retos muy importantes en la planificación del desarrollo de las redes, así como en la gestión de la energía eléctrica en las redes.
En este nuevo escenario de flujos de energía bidireccionales coinciden dos efectos simultáneos:
- Cambios en la generación de electricidad: que incluye la conexión de instalaciones renovables en la red de distribución cerca del consumidor, muchas de ellas formadas por instalaciones de autoconsumo.
- Cambios en el consumo de electricidad: Aumentará con la electrificación de nuevos usos para aprovechar la producción renovable y disminuirá con el autoconsumo y las medidas de eficiencia energética que toman los consumidores.
La transición energética se está acelerando. La reciente actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima incrementa la ambición para alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono antes de 2050. Desde 2022, desde la guerra de Ucrania, el aumento en la ambición de los objetivos de descarbonización y la necesaria transición energética se han visto reforzados por la necesidad de impulsar la independencia energética de Europa
En toda esta revolución energética, ¿qué papel van a jugar las redes?
Las redes de distribución tendrán un rol clave de facilitador de esta revolución energética porque:
- Tendrán que hacer frente a un incremento de la demanda eléctrica. Por ejemplo, un consumidor doméstico completamente electrificado podría llegar a multiplicar por 3 su consumo eléctrico.
- Habrá una mayor dependencia de la sociedad hacia la red de distribución, lo cual hará más importante los aspectos relacionados con la calidad y fiabilidad de suministro.
- El consumidor exigirá cada vez más un servicio de mayor calidad al menor coste
- Permitirá la integración de todos los agentes que necesita la transición energética. De toda la generación distribuida, del autoconsumo o de los agregadores, por ejemplo.
- Deberán estar preparados para facilitar nuevos servicios que los generadores, comercializadores, agregadores independientes y consumidores podrán demandar.
Los objetivos de la revolución energética no serán conseguidos sin una red de distribución eléctrica digitalizada. Es su reciente informe “Power System of the Future. Keys to deliver capacity on the distribution grid”, Euroelectric ha indicado la necesidad de transformar las redes de distribución para acometer el desafío de los objetivos europeos para la transición energética. En total, más del 70% de la nueva capacidad renovable acabaría conectándose directamente a las redes de distribución. (Connecting the Dots, Eurelectric, January 2021).
- 38 mil millones € de inversión anual necesaria de 2021 a 2030 (incremento del 22% con respecto a la actualidad)
- 61 mil millones € de inversión anual necesaria de 2030 a 2050 (incremento del 97% con respecto a la actualidad)
¿Qué papel tiene la digitalización para alcanzar el gran reto que la transición energética plantea a la red de distribución eléctrica?
La digitalización nos permite implementar nuevas formas de gestionar nuestros activos mediante técnicas de mantenimiento predictivo basados en Big Data y Machine Learning, de la monitorización avanzada de nuestra red, del uso de técnicas personalizadas de tala y poda según el potencial crecimiento de la vegetación en cada lugar, del diseño de nuevas instalaciones eléctricas mediante tecnología BIM (Building Information Modeling) o del uso de Gemelos Digitales alimentados por el mapeo de nuestra red haciendo uso de la tecnología LiDAR.
La operación de nuestros activos también se está transformando por completo mediante la implementación de sistemas que estiman la posible afectación de eventos climatológicos adversos en nuestra red para anticipar reconfiguraciones, minimizar su posible afectación a clientes e incluso la necesidad de activar con antelación recursos sobre el terreno. Ante escenarios climatológicos adversos, la reposición del suministro se realiza de forma automática mediante el sistema LARS que es capaz de reconfigurar nuestra red y reponer el suministro al resto de clientes en un mínimo tiempo.
¿Cómo se puede mejorar la calidad de suministro con la digitalización?
La digitalización aporta grandes ventajas en toda la cadena de valor de la actividad de distribución. Entre ellos, podemos destacar 3 aspectos principales: monitorización avanzada, implementación de inteligencia artificial y dispositivos telecontrolados para la operación de la red.
En primer lugar, la monitorización avanzada de la red permite mejorar la información del estado de los activos, así como conocer con detalle los flujos eléctricos de toda la red. Por ejemplo: Monitorización avanzada de Centros de Transformación con información en tiempo real del transformador; Cámaras Termográficas fijas en activos críticos; Cámaras de visión para inspeccionar visualmente y de forma inmediata una instalación; Digitalización de apoyos de Alta Tensión. Sensores en apoyos de AT para comprobar constantemente su verticalidad y condiciones ambientales (temperatura y viento).
En segundo lugar, implementar soluciones basadas en big-data e inteligencia artificial para aprovechar el potencial de la monitorización avanzada. Por ejemplo: Sistema para anticipar la afectación de eventos climatológicos adversos en la red, Digitalizar las comunicaciones entre el Centro de Control y los Operadores de Red, Sistema reposición automático de averías (LARS), Ajuste dinámico de intensidades nominales en líneas de Alta Tensión, etc.
En tercer lugar, dispositivos telecontrolados para optimizar la operación de la red.
¿Qué papel juegan estas redes en el funcionamiento de un país como España?
Las redes eléctricas juegan un papel fundamental en nuestra sociedad porque facilitan que todos los ciudadanos tengamos acceso a la electricidad que:
- Es un bien de primera necesidad.
- Es un factor de producción clave para muchos sectores económicos, entre ellos, la industria pesada.
La importancia de las redes radica en que:
- están desplegadas por toda la geografía nacional para dar suministro a todos los ciudadanos, incluidas las zonas rurales más alejadas.
- sus actividades de construcción, ingeniería y operación generan actividad económica en toda la geografía.
- facilitan el desarrollo de otras actividades económicas: nueva capacidad renovable, conexión de vehículo eléctrico, etc.
Según el Informe Monitor DTT (2018), las actividades de transporte y distribución eléctrica contribuyen un ~30% del total del Valor Añadido Bruto que aporta todo el sector eléctrico al PIB español. La actividad de redes aglutina aproximadamente el 40% de los empleos del sector eléctrico, creando empleo de calidad, con baja temporalidad y alta cualificación media.