¿Considera estratégica la necesidad de reducir el consumo energético entre las empresas del sector industrial? ¿Entra en sus planes estratégicos acciones para mejorar la Eficiencia Energética?
La estrategia es que las nuevas tecnologías nos ayuden a optimizar los recursos energéticos, ya que es previsible que el consumo en la industria continúe aumentando en el futuro.
Nuestro trabajo es usar estas tecnologías implantando sistemas más sostenibles, que permitan avanzar en autoconsumo, sustituyendo paulatinamente el uso de energías contaminantes.
Todos debemos aprender a mirar con nuevos ojos y aprovechar la transición para innovar a todos los niveles en nuestras empresas.
Por supuesto, la mejora de la Eficiencia Energética entra en nuestros planes y ya estamos aplicándolo.
¿El principal foco de interés del sector (¿Smart Buildings, Smart Cities, Industry 4?, Smart Data Center…) es la eficiencia energética? ¿Qué aporta la tecnología en este sentido?
Es el caso que presentamos en este foro, nos hemos enfocado en mejorar la eficiencia energética de las estaciones de telecomunicaciones analizando la naturaleza de sus consumos mediante la tecnología, consiguiendo reducir el consumo de energías convencionales de una forma significativa, amortiguando de esta forma el previsible aumento de consumo que traerán las nuevas aplicaciones.
¿Qué acciones desarrolladas recientemente por su organización considera más relevantes en materia de Eficiencia Energética? ¿Qué papel han tenido las TIC/Tecnologías? ¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en este ámbito?
El proceso de transición energética es transversal a todos los sectores y nosotros hemos avanzado en el desarrollo de soluciones para determinados consumos en sectores de importancia crítica, en el que los consumos de energía se están incrementando con la llegada de nuevas tecnologías.
El modelo que implementamos en la Agencia Espacial Europea es la suma de un conjunto de soluciones que mejora la eficiencia energética en un 27% con respecto a los sistemas más innovadores, además, hemos desarrollado herramientas que nos permiten acceder al sistema en tiempo real, monitorizarlo y realizar acciones remotas e incluso anticiparnos a posibles incidencias mediante la implementación de algoritmos. Los datos registrados tras un año de uso son sorprendentes.
¿Cuál ha sido su papel en este ámbito? ¿En su organización hay más implicados en estos temas (CIO, CINO, COO, CEO…)?
En nuestra organización, todos estamos alineados con el objetivo de impulsar la transición energética, porque creemos en ello y forma parte de nuestros valores.
Para nosotros, impulsar la transición energética significa analizar los problemas pensando en el planeta, significa analizar de forma exhaustiva los consumos para ser capaces de proponer sistemas correctamente dimensionados, significa utilizar lo realmente necesario y sostenible y no lo que nos produce mayor beneficio.
En este proyecto se suma la ilusión, experiencia y conocimiento de todos los implicados, incluyendo la inestimable ayuda de la UAM y CEGASA, además, de los fabricantes implicados y sus equipos de I+D+I.
¿Cómo le gustaría ver a España, desde el punto de vista de la competitividad energética, en el año 2030?
España, siempre ha sido un país energéticamente dependiente. Esta circunstancia ha limitado su desarrollo económico con respecto al resto de países de la UE.
Estamos viviendo un proceso de transición energético y tecnológico sin precedentes. Las nuevas tecnologías están cambiando nuestros hábitos de trabajo y hasta la forma en la que nos relacionamos con nuestros familiares y amigos.
Las centrales térmicas dejaran de producir electricidad, y en España tenemos una posición privilegiada que podría situarnos a la vanguardia como sustitutos a las fuentes de energía de origen fósil y nuclear. Debemos agilizar por nuestro propio bien, por el medio ambiente y, por supuesto, también por razones económicas y laborales.
Deberíamos llevar años exportando energía al resto de Europa, sin embargo, importamos el 70% de la energía que consumimos. Estamos ante la oportunidad de construir una industria competitiva si sabemos aprovecharla.
La pregunta no es cómo me gustaría verlo a mí. En realidad, tenemos que preguntarnos cómo vamos a gestionar esta oportunidad que se presenta