La red eléctrica de las ciudades está experimentando el cambio de paradigma producido por el advenimiento de la generación distribuida basada en renovables y el autoconsumo. Una red de distribución o una microrred (como la de un polígono industrial o un puerto), habituada a flujos unidireccionales de energía, ahora tiene que estar preparada para la transmisión de flujos bidireccionales. A priori, estos flujos bidireccionales pueden suponer ciertos problemas a la red (como por ejemplo sobretensiones) pero, gestionados de forma inteligente, pueden no sólo evitar estos problemas, sino también proveer de mayor flexibilidad a la red e incrementar la energía limpia que fluye por nuestras ciudades. Con esta ambición, ETRA ha desarrollado la plataforma ÉTER, cuya finalidad es la de controlar, gestionar y monitorizar la red eléctrica, mejorando la flexibilidad, estabilidad y seguridad de la misma; siendo particularmente relevante ante escenarios con gran penetración de energías renovables.
Las funcionalidades a implementar se han diseñado, desarrollado y validado en condiciones reales en los proyectos NOBEL GRID, WiseGRID, X-FLEX y CROSSBOW, todos ellos financiados por el programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea. Para diseñar estas funcionalidades, se han tenido en cuenta las necesidades expresadas por operadores de red tanto de España como de diversas partes de Europa, lo cual permite a la plataforma solventar las necesidades de inteligencia actuales de estos actores y las que previsiblemente tengan en el futuro. Así, además de la gestión de flujos de energía bidireccionales, estos operadores de red o microrred podrán centralizar todos los flujos de información en una misma plataforma y podrán estar preparados para los nuevos mercados de flexibilidad locales que están siendo promovidos por la Comisión Europea. De esta forma, se permite una interacción más fluida con pequeños y medianos productores de energía renovable distribuida, favoreciendo nuevos modelos de negocio basados en la agregación de flexibilidad para dar soporte a la red.
Entre dichas funcionalidades, destacan:
- Integración de fuentes de información diversas: Supervisión, Control y Adquisición de Datos (SCADAs), Smart meters, concentradores, etc.
- Integración e interacción con proveedores de flexibilidad: Comunicación con infraestructura de recarga, vehículos eléctricos y baterías.
- Analíticas sobre datos de la red: Flujos de potencia, generación y predicción de energías renovables, y calidad de la red, entre otros.
- Incremento de la observabilidad: Integración de la topología de la red y sistemas sistema de información geográfica (GIS).
- Soporte a mantenimiento: Gestión de equipos de mantenimiento.
Todas estas funcionalidades y beneficios hacen que ÉTER se convierta en el perfecto aliado para operadores de redes de distribución o microrredes, facilitándoles su labor de proveer de energía verde y de calidad a los ciudadanos a los que dan servicio.