Impulsada por las instituciones reguladoras, por los retos que le impone su posición como sector crítico y estratégico en la vida de la ciudadanía y por una continua necesidad de mejorar la eficiencia en sus procesos, desde sus albores la industria de la energía eléctrica se ha visto en la obligación y en la necesidad de mantenerse a la vanguardia de la innovación.
Esta realidad ha exigido de forma continua al sector energético la implantación temprana de nuevas tecnologías disponibles en el mercado. Durante los últimos años esta exigencia ha llevado a las grandes compañías a participar de forma muy activa en una carrera por la Transformación Digital que la Internet de la Cosas (Internet of Things -IoT-, en inglés) apoya de una manera crucial.
La innovación que brinda la IoT al sector eléctrico, viene de la mano de varios factores como:
- La disponibilidad de nuevos sensores que permiten digitalizar de forma sencilla y barata las magnitudes físicas presentes en los procesos de generación y distribución de energía.
- El despliegue masivo de redes de comunicación móvil por parte de las operadoras de telecomunicación, así como el abaratamiento de los módulos de comunicaciones debido a la adopción masiva de la comunicación móvil por parte de la sociedad. Ambos factores permiten enviar los datos digitalizados por los sensores de forma fácil, rápida y económica a través de Internet.
- La computación en la nube que facilita y ahorra costes en el análisis masivo de las ingentes cantidades de datos (BigData) que una red tan extensa y compleja como la eléctrica genera potencialmente.
- El actual renacimiento de la inteligencia artificial impulsado en gran medida por la reducción de costes en las unidades de procesamiento gráfico (GPUs) que la industria del videojuego ha propiciado. Equipados con estos procesadores los científicos de datos pueden entrenar modelos predictivos en tiempos antes impensables gracias a la rapidísima ejecución de los algoritmos. Estos modelos dotan a la red inteligente (Smart Grid) de la capacidad de pronosticar fallos en la red o aumentos en la demanda de energía.
Conscientes de las necesidades y retos a los que se enfrenta el sector eléctrico y siendo una empresa tecnológica totalmente dedicada a la IoT, en amplía))) siempre hemos querido apoyar al sector con nuestros productos y servicios y ciertamente hemos tenido la oportunidad y el privilegio de hacerlo con nuestra plataforma OpenGate a lo largo de estos últimos años.
Nuestra visión de la IoT en amplía))) es holística e integradora, creemos firmemente que el IoT debe ayudar tanto a los equipos humanos que se encargan de la operación del negocio, como a aquellos que cuidan de que la infraestructura que soporta el negocio ofrezca la mayor disponibilidad posible.
Con esta visión en mente y desde el año 2003, nos hemos embarcado en la tarea de desarrollar una plataforma IoT que llamamos OpenGate y que unifica de la mejor forma posible las tecnologías de operación y de información que las empresas necesitan para emprender, con la mayor garantía de llegar a buen puerto, su viaje hacia la transformación digital.
Nuestra misión es ofrecer una solución capaz de recolectar, procesar y mostrar información proveniente de múltiples fuentes de datos, sobre diferentes protocolos y canales de comunicación unificando la gestión remota de los dispositivos que conforman la infraestructura que da soporte a las actividades de las compañías con el procesamiento y visualización de la valiosa información de negocio.
Con este cometido pretendemos ampliar el conocimiento y la capacidad de operación que las compañías tienen sobre sus propios activos, abriéndoles las puertas, antes cerradas, a la elaboración de nuevas estrategias que les permitan la mejora en la eficiencia de sus procesos. Dotadas de estas nuevas herramientas, las compañías pueden proponerse nuevos objetivos como la reducción de costes, la mejora de la calidad de su servicio o la apertura a nuevos modelos de negocio, antes vedados por falta de información o falta de capacidad operativa.
Tenemos la grata experiencia de estar ayudando con éxito a grandes empresas de distribución eléctrica en la optimización de sus procesos de despliegue masivo de concentradores de contadores y contadores inteligentes en campo, así como en la de gestión y resolución de las incidencias que, día a día, se manifiestan en los activos ya desplegados en campo. Una parte muy importante de la ayuda que prestamos a estas compañías consiste en la monitorización y gestión de la población de dispositivos, así como de la calidad de la red de comunicaciones móviles en la que se apoyan para sus operaciones.
También estamos trabajando codo con codo en la transformación digital de compañías que proveen de infraestructura a la compleja red de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica. Transformadores eléctricos, centros de transformación, grandes interruptores aéreos, todos estos elementos y muchos más, componen la red activa e inteligente (Smart Grid) que exige la sociedad moderna, una sociedad que requiere más y más electricidad para cubrir nuevas demandas como la que traen los vehículos eléctricos. Con la incorporación de tecnologías IoT estamos ayudando a que esta red inteligente sea capaz de reaccionar de forma autónoma, rápida y sencilla ante incidencias y cambios en la demanda.