¿Está España preparada para cumplir con los retos del despliegue de la infraestructura de recarga en la situación actual?
En EVBox estamos convencidos de que España está preparada. Por un lado, como confirmó Red Eléctrica de España, nuestro sistema de generación y transporte es adecuado. Además, disponemos de una tecnología de recarga avanzada y profesionales muy preparados.
Sin embargo, se necesitan estímulos para hacerlo realidad, tanto económicos (ayudas, fondos y financiación), como legislativos. Por ejemplo, aprobar La Ley de Cambio Climático y Transición Energética, la cual es clave para implantar puntos de recarga rápida en las principales estaciones de servicio.
¿Cuáles consideras son las tendencias de más relevancia con respecto a la adaptación de vehículos eléctricos en este ámbito?
Según datos de AEDIVE, los vehículos eléctricos tienen una principal importancia en el negocio B2B, que aprovechan las ayudas económicas del gobierno para actualizar sus flotas e instalar infraestructura de recarga.
Una de las tendencias en este ámbito, es la de reembolsar automáticamente a los empleados por el consumo en sus viviendas de la recarga del coche eléctrico de empresa. De esta manera, se promueve la movilidad sostenible de manera cómoda para los usuarios, a la vez que las empresas adquieren una mayor identidad sostenible.
¿Qué papel juega la tecnología (como la recarga inteligente) en conseguir que edificios/instituciones/ciudades/centros de trabajo sean más eficientes energéticamente hablando?
La carga inteligente de vehículos eléctricos es una tecnología esencial a la hora de tener un sistema eléctrico más eficiente, aprovechar las energías renovables, y reducir costes. El objetivo es que la potencia de carga de los coches eléctricos se adapte en cada instante a las necesidades del sistema y de los usuarios.
Aunque esta inteligencia está asociada al punto de recarga, cada vez será más importante la inteligencia del vehículo. Especialmente cuando se avance comercialmente en la recarga bidireccional (conocida como V2G o Vehicle to Grid), que permite que las baterías de los coches puedan inyectar energía a la red. Esto, supondrá un plus para la eficiencia energética, potenciando aún más la generación procedente de energías renovables.
Quién consideras está impulsando más la transición hacia una movilidad sostenible, y el uso de los vehículos eléctricos: ¿Gobierno, proveedores de tecnología, alianzas, empresas usuarias…? ¿Cuáles son las principales barreras?
Casi siempre la tecnología va por delante de las leyes que dicta el Gobierno. Por ello, es clave el papel de iniciativas como ChargeUp Europe o asociaciones como AEDIVE, que promueven y lideran proactivamente esta transición entre todas las partes interesadas.
Entre las principales barreras está la desinformación, que en ocasiones conlleva a una concepción errónea de que la movilidad sostenible no es una alternativa viable para cubrir nuestras necesidades, o que la tecnología disponible no es la adecuada.
¿Considera que ha mejorado la posición competitiva de su organización con la implantación de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC)?
La movilidad será eléctrica, conectada y autónoma. Por ello, como empresa líder en el sector en pleno auge del Internet de las cosas (IoT), es imprescindible que nuestras estaciones de recarga utilicen las TIC para comunicar, registrar y presentar los datos en nuestra plataforma de gestión en la nube Hey EVBox.
Esta plataforma es uno de nuestros puntos diferenciadores. Los conductores de vehículos eléctricos con acceso a ella, podrán utilizar la mayor parte de los puntos de recarga pública de Europa, gracias a acuerdos de interoperabilidad con las principales redes que ofrecen este servicio.
Sin embargo, el desarrollo de las TIC no solo afecta a la infraestructura de recarga. Lo ideal es que hubiera un marco único de comunicación que permita la movilidad desde todas las partes implicadas (usuarios, vehículos, profesionales, infraestructura, red de distribución eléctrica, tráfico, parkings, etc). Para ello, se requiere construir una red estandarizada, bidireccional, y con comunicaciones en tiempo real.