Traslado de la subida de costes energéticos a la Industria y consumidor
Los efectos de la crisis energética han golpeado con dureza a la economía industrial en el curso 2021-22. Durante este periodo los precios en la Industria se dispararon un 41,8% en relación al anterior. El uso intensivo de productos energéticos ha dejado a las compañías industriales muy expuestas al impacto de la crisis energética actual. La principal consecuencia de este impacto ha sido el traslado a los precios de la producción industrial.
De este modo, el índice de precios de industriales (IPRI), que elabora el INE, registró una variación incremental del 10% en 2021 (la cifra más alta desde 1985).
El contexto que estamos viviendo en 2022, con la guerra entre Rusia y Ucrania y su influencia en el alza en el precio de la energía, nos lleva a pensar que la situación podría empeorar de cara a la crisis energética en el sector industrial y a su necesidad de incrementar los precios, sacrificando parte de su demanda a costa de salvaguardar sus márgenes.
La obtención y explotación de datos en las plantas industriales con las nuevas tecnologías IoT abre una nueva vía de optimización de procesos, incluyendo la eficiencia energética
El nacimiento de IoT Industrial ha significado que las organizaciones estén lidiando con más tecnologías y dispositivos de uso intensivo de datos que nunca, los cuales no sólo habilitan la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio, sino la eficiencia operativa (incluida la eficiencia energética).
A medida que aumenta el consumo digital de datos en la Industria, sus cargas de trabajo se trasladan al borde de la red en ubicaciones fuera de la infraestructura física IT. Con esa migración de recursos viene el desafío de asegurar que los datos permanecen siempre accesibles de manera sostenible.
La computación en el Edge juega un papel fundamental en la sostenibilidad y eficiencia energética porque está diseñada específicamente para acercar las aplicaciones y los datos a los dispositivos y sus usuarios. Esto ayuda a las organizaciones a reaccionar mejor a los cambios en las demandas de los consumidores y mejorar los procesos para crear productos y servicios más sostenibles. Esto incluye ayudar a las organizaciones a digitalizar sus procesos de fabricación mediante el uso de datos generando comentarios y alertas en tiempo real para aumentar la eficiencia en toda su cadena de suministro, reducción de costes energéticos y emisiones de carbono, incluidas.
Más allá de las soluciones de eficiencia energética que pueden desplegarse en el Edge, los propios sistemas de borde presentan algunas características inherentes a su arquitectura que pueden ayudar a disminuir la huella de carbono y optimizar el uso de energía:
- Eficiencia: Al tener un espacio restringido en el borde, el diseño de equipos de almacenamiento, red y respaldo de energía se optimiza, lo cual hace que se necesite menos espacio y por consiguiente menos uso de energía para el procesamiento de información. Esto se traduce en menores costos y mayor eficiencia de los dispositivos locales.
- Energías renovables: Por su naturaleza, el Edge Computing encaja a la perfección en industrias muy distribuidas, con activos localizados en diferentes ubicaciones geográficas, lo que la hace más apta para el despliegue de proyectos de energía renovable, como la energía solar o la eólica.
- Menor latencia: El procesamiento de datos más cerca de la fuente donde se crearon permite reducir la latencia y en consecuencia también la energía necesaria para el funcionamiento de los equipos en la red.
- Big Data: no toda la información transmitida por los dispositivos IoT y que conforma el universo Big Data es realmente útil, el procesamiento completo de datos ralentiza las tareas de análisis por exceso de información. Es aquí donde la computación en el borde puede hacer una importante labor de filtro, analizando in situ la información en tiempo real y tan sólo enviando a la infraestructura centralizada aquellas desviaciones relevantes que puedan tener un impacto significativo. Esto permite reducir considerablemente el consumo energético, además de los costes de ancho de banda.
- Reutilización del hardware: Con la infraestructura adecuada se pueden reutilizar diferentes dispositivos (retrofitting) que actualmente se están subutilizando, disminuyendo con esto la generación de residuos electrónicos.
La descentralización está suponiendo un nuevo paradigma en el mundo tech. Con el desembarco del Edge Computing, es posible una administración más eficiente de los sistemas de computación (esenciales en esta nueva economía del dato) por ejemplo, haciendo que los recursos estén «inactivos» cuando no se necesiten. La orquestación y la gestión de un conjunto distribuido de centros de datos (más pequeños) permite que los recursos informáticos (y, por lo tanto, la energía) se utilicen de manera eficiente.
Las soluciones inteligentes Edge pueden además ayudar a diferentes tipos de empresas a resolver sus necesidades de eficiencia energética a través de sensores en tiempo real y tomar medidas preventivas en la red.
Entre las aplicaciones inteligentes más relevantes encontramos:
Gestión de la demanda
Aplicación de predicción y optimización de demanda a través de algoritmia para la administración de energía mediante la monitorización de la red con sensores en tiempo real. El Edge Computing permite ejecutar procesos de flexibilidad energética allá donde se genera o donde se consume, y adecuar la demanda a las posibilidades de generación.
Edge Computing para la generación distribuida
En los centros industriales comienzan a surgir pequeñas ‘centrales’ de generación de energía que alteran el balance de oferta y demanda. Por lo que surge la necesidad de poder gestionar una gran cantidad de elementos distribuidos de generación y almacenamiento eléctrico, que permita optimizar el reparto y distribución de la energía. El Edge Computing facilita una gestión inteligente de todos estos activos y permite tratar de manera agregada a todos ellos bajo la figura de las “Virtual Power Plants”.
Edge Computing para la detección de fraudes y fugas
El desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial en el Edge permite detectar posibles fraudes y fugas en el consumo de la red de baja tensión. El consumo de energía eléctrica mediante enganches ilegales a la red supone un aumento no previsto de la demanda que puede ocasionar grandes pérdidas a las compañías.
Modernización de la infraestructura de IT
Gracias a la virtualización de infraestructuras a través de nodos Edge, es posible reducir su espacio físico y los requisitos de consumo.
Es innegable, el auge del Edge Computing como una de las tecnologías habilitadoras en la transformación digital del sector industrial. Ahora además supone un balón de oxígeno en la difícil coyuntura energética en la que se ven inmersa las organizaciones alrededor del mundo.
La introducción de un modelo dinámico de IA respaldado por tecnología edge computing en los entornos industriales actuales puede reducir significativamente el uso de energía, reduciendo las emisiones de carbono e iniciando una caída en los costos de energía en pocos meses. Buscar formas de reducir el uso de energía no es nuevo para la Industria, pero crear formas escalables de hacerlo sí lo es.
La mayoría de los equipos actuales no funcionan a niveles óptimos, por lo que se pueden lograr importantes ahorros de energía. La optimización del rendimiento es fundamental para reducir el uso de energía y aumentar la sostenibilidad en un entorno industrial.
Aquellas empresas que desarrollen las capacidades para conectar dispositivos, así como recoger y explotar datos en tiempo real de manera eficiente, serán sin duda las que tendrán un papel protagonista en la Industria 5.0 del futuro.