¿Estamos hoy en un momento clave para la transición energética? ¿Qué papel juegan las compañías energéticas tradicionales en esa transición energética?
Absolutamente, estamos en un momento muy importante para la transición energética, un momento complejo de recuperación económica y entorno volátil de precios, y a la vez, ante una ventana de oportunidad única, con nuevas tecnologías que impulsan el cambio energético (biocombustibles, hidrógeno, economía circular, sumideros de carbono…). Asimismo, diferentes grupos de interés demandan procesos y productos cada vez más sostenibles y es el momento de reducir el impacto medioambiental.
Durante los últimos meses hemos visto como gobiernos de diferentes países, empresas y particulares ponen un mayor foco en la sostenibilidad y la transición a una energía más verde. La apuesta por lo sostenible se ha convertido en la piedra angular de nuestra estrategia y debe ser la primera respuesta de las empresas energéticas. El paso importante que las compañías deben tomar para fortalecer sus posiciones es la descarbonización a lo largo de toda su cadena de valor.
Por lo que, el rol de las energéticas tradicionales, como principales proveedores de energía, creo que no sólo es cumplir su parte en la descarbonización de sus operaciones, sino actuar como tractores en esta materia para toda la industria, impulsando la transformación hacia una industria más sostenible. Las grandes energéticas tenemos la responsabilidad de incentivar al resto de compañías para reducir el impacto de nuestra huella medioambiental y orientar nuestros negocios hacia un mix energético bajo en carbono. Solo así podremos transformar el sector y definir unas tendencias clave mucho más sostenibles para el medioambiente y la sociedad en su conjunto.
Este reto de la descarbonización es tan mayúsculo que será necesario un amplio abanico de tecnologías que compitan entre sí en igualdad de condiciones, desde la neutralidad tecnológica, de forma que la investigación y el desarrollo tecnológico ayuden en la lucha contra el cambio climático.
Considera estratégica la necesidad de reducir el consumo energético entre las empresas sector industrial? ¿Se han marcado una Plan con objetivos y tiempos para mejorar la Eficiencia Energética?
Repsol tiene un papel relevante liderando la transición energética con los objetivos del Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y, por lo tanto, nos hemos comprometido con un plan y objetivos muy claros. Fuimos la primera compañía en nuestro sector en apoyar el protocolo de Kyoto. Igualmente, en 2020, volvimos a liderar el cambio, al convertirnos en la primera gran energética global en fijar el compromiso de alcanzar las cero emisiones netas (Net Zero) en 2050. Para convertir este objetivo en una realidad, se definieron tres objetivos intermedios, para los años 2025, 2030 y 2040, de reducción del Índice de Intensidad en Carbono (IIC).Y no nos hemos quedado ahí. Nuestro compromiso con la transición energética es tan alto que, en el pasado Low Carbon Day, en octubre de este año, anunciamos un compromiso aún más ambicioso para estos objetivos intermedios. Nuestro objetivo actual es reducir el IIC un 15% para el 2025, un 28% para el 2030 y un 55% para el 2040, para finalmente alcanzar el 100% en 2050 y ser Net Zero.
Para conseguir esta transición energética, en nuestro Plan Estratégico 21-25, anunciamos la decisión de invertir 5.500 M€ en iniciativas bajas en carbono para el periodo 2021-2025. De nuevo, en octubre de este año, en nuestro Low Carbon Day aumentamos en 1.000 M€ dicho objetivo, hasta 6.500 M€. Es por ello que Bloomberg en su Benchmark 2021, reconoció el Programa como clave para la consecución de nuestro objetivo Net Zero 2050 y clasificó a Repsol como el Programa Digital con la mayor ambición entre las mayores energéticas globales.
Las iniciativas por desarrollar con dicha inversión incluyen una mayor generación de energías renovables, economía circular, hidrógeno verde y captura, uso y almacenamiento de carbono entre otras. Por ejemplo, en la generación de energías renovables la capacidad de generación de bajas emisiones alcanzará los 6 GW en 2025 y los 20 GW en 2030. Y en el área de hidrógeno, Repsol opta a ser el líder en hidrógeno renovable en la Península Ibérica con una producción esperada en 2025 equivalente de 0,55 GW y con la ambición de superar 1,9 GW en 2030.
¿A qué retos se enfrenta el sector tecnológico? ¿Y el sector industrial?
Son varios los retos y oportunidades en el sector tecnológico y los actores de esta industria deben mantenerse continuamente actualizados para mantener sus ventajas competitivas. Podríamos resumir estos retos digitales en cuatro: la Inteligencia Artificial, la ciberseguridad, el talento y la continua absorción de nuevas tecnologías.
La Inteligencia Artificial (IA) es y seguirá siendo una gran oportunidad y a la vez un reto para las empresas. Aunque todas las grandes empresas intentan trabajar con IA, un estudio reciente de MIT Management Review señalaba que sólo un 10% de empresas conseguía retornos significativos gracias a esta tecnología. Este mismo estudio citaba a Repsol y en concreto al Programa de Digitalización como ejemplo de éxito dentro de ese 10%. Además, en Repsol confiamos profundamente en la colaboración para hacer la industria avanzar. Es por ello que participamos como socios fundadores de IndesIA, el primer consorcio industrial de España para el desarrollo de iniciativas de IA, o en AMETIC una asociación formada por +3000 empresas españolas promoviendo la digitalización.
La ciberseguridad requiere una infraestructura segura y en constante revisión para proteger no solo desde una perspectiva económica sino también la seguridad de las personas e información que hay en ella. Es fundamental concienciar al equipo directivo, empleados, y otros usuarios.
En este entorno crecientemente tecnológico y digital, el desarrollo humano y la búsqueda de talento es más importante que nunca. La pandemia y las nuevas formas ágiles de trabajar han cambiado las reglas del juego. El resultado es una frontera cada vez más fina entre una empresa industrial y tecnológica. Los empleados compiten a nivel mundial y la demanda de las empresas por perfiles tecnológicos acelera más rápido que la oferta. Para asegurar que Repsol dispone del talento necesario, nos enfocamos en mejorar continuamente nuestra propuesta de valor como empleador y reforzar las oportunidades de formación de nuestros empleados. Un ejemplo es el Repsol Data School que creamos en alianza con la escuela de negocios ISDI y Telefónica para formar a nuestros empleados en la cultura data-driven. Se espera que, en 2023, hayan participado en la Data School ~800 empleados. Esta iniciativa acaba de ser premiada como la mejor práctica de Digitalización en el desarrollo del talento digital en la IV edición de los Premios ABB Ability Digital Award, convocados anualmente con el Club de Excelencia en Sostenibilidad.
Finalmente, un reto clave para las empresas es establecer procesos que les permitan reinventarse constantemente y mantenerse actualizados, incorporando las ventajas de las nuevas tecnologías para mantener las ventajas competitivas. Para asegurar que nos mantenemos a la vanguardia integrando las últimas tendencias tecnológicas, hemos creado 9 Hubs especializados en tecnologías disruptivas (Data, Analytics & IA, Blockchain, Digital UX & Design, Cloud etc.). Estos Hubs formados por expertos altamente cualificados trabajan codo con codo y de manera transversal con los negocios para identificar nuevos casos de uso para aplicarlas.
Desde el punto de vista del sector industrial, dado que tiene un alto componente tecnológico, está sujeto a los mismos cuatro retos que acabamos de discutir. En particular, destacaría algunas nuevas tecnologías como el Internet de las Cosas, los Digital Twins, el 5G o el Blockchain que están revolucionando el sector permitiendo una mayor trazabilidad de procesos, y una interconexión mayor entre operario y máquina, mejorando la seguridad en las operaciones y haciendo económicamente viables modelos productivos más sostenibles, en línea con este gran reto de la transición energética que impulsamos desde Repsol.
¿Cuál ha sido su papel en este ámbito? ¿En su organización hay más implicados en estos temas (CIO, COO, CEO…)?
El ámbito de la digitalización, como está sucediendo con la sostenibilidad de la que ya hemos hablado, va a cambiarlo todo. No es un reto que pueda tratarse con una estrategia gradual. Es una revolución que nos obliga a replantearnos todo.
Por eso, desde su lanzamiento en 2017 el Programa ha estado completamente centrado y alineado con los problemas y necesidades de los negocios y es así, que está siendo el principal catalizador del cambio.
Durante los últimos 4 años he tenido la oportunidad de liderar el Programa como Director Arquitectura y Digitalización el Programa Digital de Repsol y más recientemente como Chief Digital Officer en el equipo de Valero Marín. Él como nuestro Director Corporativo de Digitalización y Servicios Globales forma parte del Comité Ejecutivo, una muestra clara de cómo el Programa tiene una altísima prioridad para Repsol. El propio Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, es un sponsor clave del Programa y ha destacado en múltiples ocasiones como este representa una palanca clave para la consecución de los objetivos de Repsol.
Otra prueba de como la Digitalización continúa siendo una prioridad transversal en Repsol es el hecho de que todos nuestros negocios han vuelto a incluirlo como una palanca clave para la consecución de sus objetivos en el nuestro último Plan Estratégico (2021-2025).
El éxito del Programa ya es una realidad con impactos recurrentes de +500 M€ y +350 casos en marcha. Asimismo, tenemos el compromiso público de alcanzar 800 M€ de impacto para finales de 2022. Además, este es un éxito compartido por todo Repsol. El Programa está presente en todos nuestros negocios a lo largo de la cadena de valor, en los 4 continentes y +20 países en los que se encuentra Repsol y gracias a la ayuda de los más de 1200 empleados que han participado en el programa. Adicionalmente, el 45% de estos casos tiene impacto positivo en nuestros objetivos de sostenibilidad, y el Programa ha transformado el modo en que trabajamos en Repsol, fomentando el uso de metodologías agiles, promoviendo la actitud emprendedora de nuestros empleados y, como ya hemos destacado, desarrollado nuevas capacidades en Repsol.
¿Considera que ha mejorado la posición competitiva de su organización con la implantación de Tecnologías de la Información y Comunicaciones? ¿y en lo referente a competitividad energética?
Completamente. La Digitalización nos ayuda a ser más eficientes en los procesos, a tomar mejores decisiones y a estar más cerca de nuestros clientes y empleados. En concreto, existen múltiples ejemplos de sistemas o herramientas a lo largo de nuestra cadena de valor, que nos permiten fortalecer nuestra posición competitiva e impulsar la transición energética.
Por ejemplo, en el área de E&P, hemos desarrollado Inwell, una herramienta que utiliza Inteligencia Artificial para ayudarnos a reducir el tiempo de perforado en un 7%. Recientemente hemos complementado Inwell con nuestra herramienta Prescriptive Analytics para informar a los operadores del mejor modelo de perforación de la superficie en tiempo real. Sólo en 2021, Inwell produjo ahorros de 15 M€ además de reducir el impacto medioambiental de la perforación.
En nuestro negocio Industrial, un claro ejemplo son nuestros casos Crude Oil Blending (COB) y Agile Scheduling Tool, dos herramientas integradas para la optimización del scheduling de crudo y productos en las refinerías. Durante 2021, hemos finalizado la implementación de COB en nuestras 5 refinerías en España. Esta herramienta utiliza advanced analytics permitido aumentar la capacidad de salida de las unidades críticas en un 1,5% sin ninguna actualización física. Una nueva herramienta de programación ágil complementa la mezcla de petróleo crudo, lo que da como resultado 2 $ / t adicionales para cargas específicas. Estas dos herramientas se van a extender a La Pampilla durante 2022.
También dentro de Industrial, destacaría nuestros casos de Smart Energy Management que emplean simulaciones y Machine Learning para buscar el punto óptimo de operación de la planta a nivel energético, resultando en una reducción de gastos y emisiones de gases de efecto invernadero. Estimamos que un potencial total de reducción de CO2 de 55kT CO2/año, gracias a estos casos.
Si seguimos recorriendo nuestra cadena de valor, en el caso de nuestro negocio de Clientes, destacaría en primer lugar el éxito de Waylet, la solución de pagos de Repsol líder en España con más de 2 millones de usuarios que, además, permite a nuestros clientes compensar las emisiones contaminantes del combustible repostado y recibió el premio ASTER 2021 a la Innovación Digital. Otro ejemplo es Vivit, producto utilizado ya por aproximadamente 240 mil clientes, que integra todos los datos de consumo de energía en el hogar de nuestros clientes, permitiéndoles entre otras funcionalidades, seleccionar la instalación de la cual disfrutar de energía 100% renovable y compensar las emisiones de gas derivadas de su consumo. También hay que , destacaría Solmatch, un caso que ilustra nuestra rotunda apuesta por la generación baja en carbono. Solmatch, es la primera gran Comunidad Solar de España, que permite a sus usuarios consumir energía 100% renovable suministrada por Comunidades Solares cercanas. Actualmente Solmatch cuenta con 218 Comunidades Solares y un total de 17.200 hogares potenciales con posibilidad de consumir electricidad 100% renovable, ahorrando 2.550 toneladas anuales de CO2. Fruto de este grandísimo potencial, hace unos meses Solmatch recibió el premio Generación Verde en la gala Retina ECO.
Por último, comentábamos como el Programa cuenta con casos que nos permiten mejorar la experiencia de nuestros empleados y ser más eficientes en nuestros procesos corporativos.
Además, impulsando la experiencia de nuestros empleados, relanzamos MyRepsolnet, la intranet de más de 25.000 empleados, y unificamos múltiples servicios para ayudar a los empleados dentro de nuestro caso de Servicios Digitales para Empleados. Por ejemplo, este año hemos lanzado el chatbot Alex que sustituirá a MyMAR y MySAE, que aprovechando el poder de la IA atiende a más de 14.000 usuarios.
Finalmente, destacaría ARiA, la plataforma Data de Repsol, que este año fue premiada por AMETIC en el foro Artificial Intelligence Summit 2021. ARiA es una pieza habilitadora clave en la mayoría de nuestros casos de Data Anaylitcs, y nos permite desarrollar modelos y escalarlos de una forma mucho más ágil y eficiente. Tal es su éxito y utilidad que recientemente se ha comenzado a comercializar a terceros, a través de un acuerdo con Accenture.