La Organización Mundial del Turismo (OMT) y el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) suman esfuerzos desde hace casi una década para impulsar el turismo sostenible. Una nueva forma de entender el sector que ha ganado peso en los últimos años debido, en gran parte, a la destrucción del medioambiente.
Objetivos para el turismo sostenible y la agenda 2030
En 2005, la OMT y el PNUMA presentaron una guía conjunta para facilitar a instituciones y sector privado el marco necesario con el que elaborar políticas orientadas a la gestión del sector en materia de sostenibilidad.
Desde entonces, consumidores cada vez más exigentes y los esfuerzos de las empresas en materia de RSC o eficiencia energética han disminuido el impacto de una de las mayores industrias del planeta.
Esto es solo en principio. Las previsiones de la Agenda 2030 son claras. En menos de una década, la población crecerá hasta alcanzar los 8.600 millones de personas, lo que incrementará el número de viajeros aumentará y la explotación de recursos naturales, que se traducirá en una mayor demanda de energía y de agua.
Según la OMT, el sector impacta directamente sobre los 17 ODS de la Agenda 2030 y marca tres indicadores clave que convierten el turismo sostenible en un algo tangible.
- Consumo de electricidad y energía en kilovatios hora (kWh) por metro cuadrado de espacio atendido.
- Consumo de agua dulce en litros o metros cúbicos (m3) por huésped por noche.
- Producción de residuos (kg. por huésped por noche y/o litros por huésped por noche).
El papel de la tecnología en el turismo sostenible
Según un informe de Accenture, 4 de cada 10 empresas aumentará entre un 6% y un 10% su inversión tanto en tecnología digital como en sostenibilidad durante los próximos años.
Apostar por el despliegue de tecnologías orientadas a la sostenibilidad es la única manera de cualificar y cuantificar su funcionamiento.
Por ejemplo, una cadena hotelera que busque poner en marcha de medidas orientadas a reducir el consumo energético y de agua necesita:
- Recabar buena información. Conocer de forma precisa el consumo de agua y energía de cada máquina.
- Analizar los datos recogidos para detectar patrones de consumo.
- Establecer objetivos de mejora y acciones correctivas en relación con los datos analizados.
Una tarea ardua y prácticamente inviable sin el apoyo de la tecnología. El despliegue de aplicaciones digitales ahorra tiempo, mejora la gestión y aporta valor al:
- Agilizar la recogida de información monitorizando el consumo de máquinas con sensores o sondas.
- Conectar de forma jerarquizada los datos de consumo en una app para se puedan realizar análisis de comportamiento.
- Generar indicadores que permitan seguir la evolución de las mejoras y medida correctivas aplicadas.
Gestión sostenible 5 estrellas
Las empresas avanzan con paso firme en sus apuestas hacia un modelo turismo de calidad, responsable y seguro.
Cada vez son más los grupos hoteleros que apuestan por binomio tecnología y sostenibilidad.
Un ejemplo es el grupo Iberostar, cuya oficina de sostenibilidad ha creado el movimiento Wave of Change, que vincula el modelo de negocio de la compañía con la ciencia.
Otro caso es el del NH hoteles, que ha digitalizado el Grand Sablon conectándolo a OTEA, una plataforma IoT basada en tecnología estándar e interoperable, con el objetivo de consumir un 20% menos de energía y un 7% menos de agua.
Las grandes empresas del sector turístico están trabajando para abordar los retos del futuro y conseguir que el turismo sostenible sea una realidad.