Capital Energy, compañía energética española nacida hace más de dos décadas y cuya vocación es convertirse en el primer operador 100% renovable verticalmente integrado de la península ibérica, reafirma su compromiso con la transición energética ecológica y justa en Castilla y León, una comunidad esencial para el desarrollo de su proyecto de energías limpias, mediante la firma de un Protocolo marco de colaboración con la Fundación Santa Bárbara (FSB).
Gracias a este protocolo, que persigue fomentar la formación profesional y la investigación en el sector de las renovables, el grupo y esta entidad pública sin ánimo de lucro, adscrita a la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, buscan incrementar la empleabilidad ligada a un sector de gran futuro, como es el de las energías limpias, y desarrollar nuevas aplicaciones tecnológicas, técnicas o procedimientos que contribuyan a mejorar los procesos de producción, gestión y almacenamiento.
Para canalizar la realización de estas acciones, Capital Energy y la FSB establecerán programas educativos adaptados a las necesidades de personal de la compañía, impulsarán la formación profesional como vía de acceso a puestos de trabajo cualificados, contribuirán a la disminución de la siniestralidad laboral a través de la impartición de programas específicos en materia de prevención de riesgos laborales y colaborarán en la ejecución de proyectos de I+D+i ligados a las renovables. Asimismo, permitirán a las personas participantes realizar prácticas correspondientes a los certificados de profesionalidad que imparte la entidad pública.
La colaboración con la Fundación Santa Bárbara se enmarca en el deseo de Capital Energy de convertirse en un aliado estratégico de Castilla y León, a través de la creación de valor social, económico y medioambiental para la comunidad y sus habitantes. En línea con esta visión, cuenta con el Proyecto Territorios, una iniciativa diferencial que combina su compromiso con la transformación del modelo energético y su deseo de impulsar el desarrollo de las regiones en las que está presente.
Castilla y León es el punto neurálgico del proyecto de energías limpias de Capital Energy. No en vano, la empresa promueve más de 40 proyectos renovables en la comunidad, que suman una potencia instalada conjunta superior a los 3.000 megavatios (MW), de los cuales dos tercios son eólicos.
La construcción de toda esta cartera implicaría una inversión global de 2.900 millones de euros, así como la creación de unos 11.000 puestos de trabajo directos en los periodos punta de las obras, una aportación fiscal aproximada de más de 50 millones de euros en la fase de construcción y una contribución al PIB de más de 850 millones de euros.