¿Qué papel juega la tecnología en conseguir que las ciudades sean más eficientes energéticamente hablando?, ¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en este ámbito?
Nos encontramos en un momento histórico, en el que las ciudades necesitan más que nunca del uso tecnológico más avanzado posible para acercarlas a ser ciudades inteligentes. La eficiencia energética en las ciudades es el paso inicial para poder llevar a cabo la revolución y acercar al ciudadano los servicios de la propia ciudad. Dentro del campo de la eficiencia energética, el alumbrado es el servicio que más posibilidades tiene para mejorar las instalaciones de las ciudades, ya que actualmente existen fuentes de luz que mejoran sustancialmente las eficiencias de las instalaciones actuales y pasadas.
La fuente de luz tipo LED mejora considerablemente las fuentes de luz utilizadas hasta el momento consiguiendo ahorros energéticos sustanciales. Pero no todo vale con el uso del LED, una correcta fotometría estudiada para cada aplicación en particular, así como el uso de una electrónica adecuada, y una disipación térmica correctamente estudiada, conllevan una iluminación que te lleva no sólo a una solución altamente eficiente energéticamente hablando, sino a un alumbrado de calidad que embellece nuestras ciudades, y eso es muy importante también.
Pero además, actualmente estamos viviendo una gran revolución de la información sin darnos cuenta y sin conocer totalmente la tecnología que nos rodea, la gestión de los datos es muy importante también en la eficiencia energética, ya que el uso de los datos de la manera más adecuada, consigue el ahorro energético de ser eficiente en acciones cotidianas de la ciudad a través de sinergias entre los distintos servicios primarios de una ciudad, para ello la conectividad también es tendencia y clave, las conexiones y la manera de conectar son vitales en la Smart City.
Los líderes no esperan a la nueva normalidad: la construyen y lideran el cambio. Schréder es líder desde hace más de 100 años en el campo del alumbrado y quiere ser el partner de la ciudad en el camino hacia la Smart City, dominando la luz, la conectividad, la gestión de datos, y las sinergias.
Considera estratégica la necesidad de reducir el consumo energético en el alumbrado público de las ciudades. ¿Se han marcado un Plan con objetivos y tiempos para mejorar la Eficiencia Energética?
El alumbrado público supone el 18% del total del consumo eléctrico nacional, es el porcentaje más alto de los distintos aspectos que necesitan de energía para su funcionamiento en la ciudad. Además, es un servicio básico y primario, que está en funcionamiento la mitad de la duración del día, y para una ciudad, es un servicio claramente indispensable para la vida de ésta, nos aporta vida, donde hay luz hay vida en la ciudad.
El alumbrado público está inmerso en una revolución tecnológica, no sólo por la incursión del LED como nueva fuente de luz que se ha mostrado como la más eficiente y con mayor recorrido de eficacia en los últimos 100 años, sino que además la electrónica que puede asociarse a la luminaria hoy en día hace que la suma de ambos disparen los ahorros energéticos en este campo.
La red de alumbrado público abarca toda la ciudad y es fácil pensar en establecer una red de comunicaciones que ayude a optimizar el uso del alumbrado y realmente ofrecer servicio siempre que sea necesario, luz en el momento adecuado, con el consiguiente ahorro energético. El uso de nodos de comunicación y/o sensórica que puede ser asociada al alumbrado, hacen que la telegestión punto a punto en el alumbrado sea necesaria para llevar la eficiencia energética al máximo nivel en el alumbrado.
Los objetivos de las ciudades van en esa línea de eficiencia energética y como referente mundial debemos ofrecerles estas soluciones que mediante conectividad dan la posibilidad de optimizar la eficiencia energética, además de controlar el alumbrado.
¿A qué retos se enfrenta el sector tecnológico? ¿Y el sector industrial?
En España hay en torno a 3,6 millones de puntos de luz de alumbrado exterior. Desde una empresa tecnológica como Schréder debemos afrontar el reto de poder ofrecer la solución más eficiente energéticamente hablando en cada caso, además de ofrecer diferentes niveles de conectividad en función de las necesidades de la aplicación, sin olvidar del embellecimiento de la ciudad a través de la luz adecuada.
El cambio tecnológico, se está dando de una manera exponencial y la demanda es alta, el poder diseñar y fabricar soluciones para esta demanda con diferentes requisitos, es un desafío. El grupo Schréder fabrica cerca de 2 Millones de puntos de luz anuales para todo el mundo, solamente en la fábrica situada en Guadalajara, fabricó más de 800.000 puntos de luz en 2020. Este hecho no puede conseguirse sin la digitalización de este sector industrial, en concreto desde Schréder creemos fuertemente que sin este proceso de digitalización no es posible dar el servicio necesario que el sector solicita.
El propósito del proceso de Digitalización es el de disponer de sistemas que ayuden a la organización de Schréder a ser eficiente y ágil, facilitando que nuestros clientes puedan demandarnos sus necesidades sin preocuparse por las cantidades o el nivel de customización requerido, es un proceso vital para la empresa y el mercado.
¿Qué acciones desarrolladas recientemente por su organización considera más relevantes en materia de Eficiencia Energética? ¿Qué papel han tenido las TIC? ¿Cuáles considera son las tendencias de más relevancia en este ámbito?
Para una empresa tecnológica puntera, es clave ofrecer soluciones que optimicen la eficiencia energética y que el mercado demanda, pero en nuestro caso no sólo en alumbrado, sino en línea con el desarrollo de la Smart City, y en ese aspecto, Schréder funda en 2019 un centro de desarrollo tecnológico en Lisboa. Este centro, es una empresa perteneciente al grupo Schréder y cuyo objetivo es acompañar a nuestros clientes a planificar espacios urbanos, reutilizar la infraestructura existente y desarrollar sistemas digitales basados en luminarias que ofrecen nuevos servicios a los ciudadanos y administradores de ciudades basados en tecnología abierta e interoperable.
Esta acción es la más relevante que hemos llevado a cabo en materia de Eficiencia Energética. Ya que no sólo pensamos en el desarrollo de luminarias altamente eficientes, algo que llevamos haciendo más de 100 años con la más avanzada tecnología disponible en cada momento, sino que, además, en este centro, nos centramos en el desarrollo de soluciones que conllevan un ahorro energético y que son altamente tecnológicas.
El centro de estos desarrollos son las TICs, que han revolucionado los procedimientos de transmisión de la información, los modos de la comunicación y la gestión de los datos, por lo que para nosotros son vitales para el desarrollo de este sector industrial en base a lo que demandan las nuevas ciudades inteligentes.
La tendencia más clara relacionada con el alumbrado es la conectividad, la propia morfología de las redes de alumbrado, hace que sea sencillo pensar en el alumbrado como en una red de comunicaciones y de conectividad con otros dispositivos y con los ciudadanos, y desde Schréder, debemos sentirnos parte de ello desarrollando soluciones que permitan esta conectividad a nivel del punto de luz, mediante nodos de control, sensores, o electrónica asociada, y a nivel de plataforma de gestión desarrollando verticales de gestión que sean integrables e integradoras. Todas las soluciones, ya sean a un nivel más bajo o a mayor nivel, deben ser siempre y sin discusión abiertas e interoperables.
¿Cómo le gustaría ver a España, energéticamente hablando, en el año 2030?
España claramente está en el camino del cambio tecnológico en el ámbito del alumbrado, estamos dando los primeros pasos, tenemos unas instalaciones dominadas por fuentes de luz “anaranjadas” en sodio, que hoy en día no es eficiente energéticamente hablando y sistemas de control en centro de mando, que no llegan a exprimir el ahorro energético al máximo, porque no controlan el final de la red que es la propia luminaria en punto a punto. Este cambio a nueva tecnología LED en torno a la fuente de luz, está ampliamente aceptado, pero hay que hacerlo bien, cuidando el producto y ofreciendo soluciones muy estudiadas mediante un buen proyecto lumínico con una fotometría adecuada para cada aplicación, como he dicho antes, no todo vale, utilicemos pues soluciones de calidad para no “matar” esta tecnología. De esta forma, veo en 2030 el alumbrado público dominado por el LED en todas sus instalaciones, es imparable.
En el apartado del control y conectividad, creo que es más difícil, pero me gustaría pensar que la red de alumbrado va a ofrecer en 2030 una red de conexión que permitirá ofrecer a la ciudad la luz adecuada en el momento preciso gracias a conectar el alumbrado con otras instalaciones y servicios como el riego, las basuras, o el parking. De tal manera que se podrá regular el consumo en función de las necesidades de las ciudades creando sinergias entre servicios, y además podremos tenerlo interconectado con el propio ciudadano ofreciendo una red fácilmente accesible.
En definitiva, me gustaría pensar que, gracias a la propia naturaleza de la red de alumbrado, en 2030, esta red, va a ser el centro del desarrollo de la conectividad de la Smart city, y esta red, nos dará la posibilidad de, mediante dicha conectividad, optimizar la tecnología más avanzada que dispongamos en materia de eficiencia energética. Desde Schréder queremos ser el compañero de la ciudad en este desarrollo.