Un grupo de 43 vecinos de Canredondo (Guadalajara) tuvo la oportunidad de descubrir el pasado fin de semana cómo se produce la energía limpia en las dos instalaciones de generación renovable que Naturgy opera en esta localidad, concretamente un parque eólico y una planta fotovoltaica.
La visita, en la que también participaron la alcaldesa de la localidad, Carmen Gil, y otros miembros de la Corporación municipal, se enmarca en el objetivo de la compañía de compartir con la sociedad su compromiso por una transición ecológica y socialmente justa, en línea con los Objetivos de Desarrollo sostenible de Naciones Unidas, y de colaborar con las comunidades locales generando valor compartido.
La alcaldesa de Canredondo, precisamente, subrayaba que el despliegue de las renovables es un motor de desarrollo en el territorio por su capacidad para generar oportunidades tanto en materia de empleo local como de formación en un sector con alta demanda laboral.
En esta ocasión, Naturgy abría las puertas de sus instalaciones de generación renovable con el fin de que los vecinos de Canredondo pudieran conocer de primera mano el funcionamiento de un aerogenerador y el proceso de transformación de la luz solar en energía eléctrica. Además, recibieron información sobre otra medida que se ha implantado en la planta fotovoltaica y que demuestra que las renovables y el sector primario pueden convivir en armonía: el pastoreo controlado.
Y es que, desde hace dos años, más de 1.000 ovejas de un pastor de Brihuega utilizan los terrenos de esta planta para pastar. Esta coexistencia resulta beneficiosa para los dos partes. El rebaño encuentra un lugar en el que no le falta alimento, en un perímetro cerrado y seguro en el que los animales pueden resguardarse bajo la sombra de los paneles en los momentos más calurosos del verano, e incluso pasar la noche, lo que supone una mejora de las condiciones laborales del pastor.
Para Naturgy, por otro lado, el trabajo que realizan las ovejas es fundamental, ya que contribuyen a realizar una gestión más sostenible de las plantas desbrozando y limpiando el terreno de hierbas y maleza de manera natural, lo que evita el uso de maquinaria y componentes químicos, a la vez que se disminuye el riesgo de incendios.
La jornada se completó también con una visita guiada a las trincheras de la Guerra Civil, que se encuentran junto al parque eólico, gracias a la Asociación Histórica Frente de Guadalajara, AHFREGU, que se encarga del estudio, divulgación y revalorización del patrimonio material e inmaterial procedente de la Guerra Civil Española, así como la arquitectura de posguerra en la provincia de Guadalajara.
Naturgy, en su apuesta por acercar las renovables a la ciudadanía, ofrece la posibilidad de conocer in situ otras instalaciones en Castilla-La Mancha. Así, en Guadalajara, además de la planta solar y el parque eólico Canredondo, también se puede visitar el Museo de Bolarque; en Ciudad Real, se pueden solicitar visitas a la planta fotovoltaica La Nava y a los parques eólicos Malagón I y II; y finalmente, en Toledo, se pueden recorrer la central hidráulica de Castrejón y la planta solar cercana Toledo PV, así como la fotovoltaica Carpio de Tajo.
Compromiso con la transición energética en Castilla-La Mancha
Naturgy tiene un firme compromiso con la transición energética en Castilla-La Mancha donde actualmente opera más de 1.150 MW eólicos, fotovoltaicos e hidráulicos a través de 29 instalaciones repartidas por distintas provincias y donde está construyendo tres nuevas plantas fotovoltaicas de 50 MW, dos de ellas en Zorita de los Canes (Guadalajara) y otra en Ocaña (Toledo).
La compañía gestiona 12 parques eólicos: Loma Gorda, San Gil y Peña I (Tartanedo), Canredondo I (Canredondo), en Guadalajara; Malagón I y Malagón II, en Ciudad Real; y Los Pedreros (Fuente Álamo), Sierra de la Oliva (Almansa), La Losilla (Chinchilla de Montearagón), La Fuensanta (Peñas de San Pedro) y Casa del Aire I y II (El Bonillo), en Albacete.
En lo que respecta a tecnología fotovoltaica, Naturgy opera siete plantas solares. En la provincia de Ciudad Real, además de La Nava, se sitúan las plantas Picón I, Picón II y Picón III (Porzuna) y en Toledo, Carpio de Tajo (El Carpio de Tajo), que comenzaron a funcionar en 2019, así como la fotovoltaica Toledo PV, en La Puebla de Montalbán, que es la más antigua de Europa, ya que inició su actividad en 1994 con una potencia pico de 1 MW. En Guadalajara, por otro lado, en 2021 entró en operación la planta Canredondo.
Finalmente, y en cuanto a generación hidroeléctrica, la compañía cuenta en Castilla-La Mancha con nueve centrales hidráulicas en las provincias de Guadalajara, Cuenca y Toledo, y una central minihidráulica en Guadalajara.